Cinthia Fernández vivió un lunes cargada de dramatismo frente a las cámaras, cuando se mostró visiblemente afectada por un nuevo golpe que llegó directamente desde sus redes sociales. La mediática, conocida tanto por su presencia en televisión como por su actividad en Instagram, reveló que su cuenta estaba nuevamente suspendida. Pero no por ningún motivo: el cierre de su perfil puso en riesgo gran parte de su economía y su rutina diaria.
“Con esto mantengo mi casa”, confesó Cinthia Fernández en La Mañana con Moria. La panelista dejó en claro que la red no es solo un espacio de exposición, sino su principal fuente de ingresos. La situación de Fernández resulta aún más grave si se considera que su perfil acumula casi siete millones de seguidores. La plataforma funciona como una verdadera herramienta laboral.
Acuerdos comerciales, publicidades y colaboraciones son el motor que le permite sostener a sus tres hijas. La suspensión de la cuenta la dejó en una posición de extrema vulnerabilidad. “Yo no vivo de la televisión, vivo de esto”, afirmó. Pero lo que más indignó a Cinthia fue el insólito motivo por el cual la plataforma bloqueó su cuenta.
Cinthia Fernández totalmente derrumbada
Según reveló Cinthia Fernández, fue por denuncias vinculadas a la “violencia sexual infantil”. La mediática explicó, las acusaciones carecen totalmente de sustento y la afectación profunda. “Vos me ves y estamos bailando con mis hijas en jogging y haciendo chistes”, se defendió.
Cinthia Fernández aseguró que estas denuncias no solo ponen en juego su imagen pública. Sucede que también generan complicaciones financieras y personales. La suspensión obliga a enfrentar procedimientos engorrosos y costos elevados para intentar recuperar el acceso a su cuenta, algo que transforma un simple cierre en un problema mucho más complejo. “No es solo que me saquen la cuenta, es todo lo que eso implica”, enfatizó.
