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POLÍTICA

Javier Milei ya está en el Nobel de la Paz mientras persiste la ausencia de María Corina Machado

 

El Presidente arribó al Ayuntamiento de Oslo para la ceremonia del Nobel, marcado por el faltazo inesperado de María Corina Machado.

 
Javier Milei

El presidente Javier Milei llegó este miércoles al Ayuntamiento de Oslo, donde se realiza la ceremonia del Premio Nobel de la Paz, en la que debía estar presente María Corina Machado, quien finalmente no asistirá según confirmó el Instituto Nobel, que dijo desconocer su paradero. El mandatario arribó acompañado por la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. La ausencia de la dirigente venezolana generó incertidumbre en la antesala del acto.

La presencia argentina y un clima de desconcierto

La llegada de Milei se produjo minutos antes del inicio del evento, programado a las
9.00 de Argentina, donde se entregarán la medalla y el diploma correspondientes al Premio Nobel de la Paz. Su presencia se convirtió en uno de los focos del inicio,
dado que el protocolo continuó adelante pese al faltazo de Machado. Funcionarios noruegos confirmaron que el acto se desarrollará sin modificaciones.

Mientras Milei ingresaba al Ayuntamiento, el Instituto Nobel reiteraba que desconoce la ubicación actual de la dirigente venezolana. La información fue compartida con medios internacionales horas antes de la ceremonia. La sorpresa dentro del organismo fue evidente, ya que el anuncio llegó a último momento y sin aclaraciones del entorno. La situación abrió un debate sobre los motivos de la ausencia.

La hija de Machado ocupará su lugar en el escenario

Ante la ausencia de Machado, el director del Instituto Nobel, Kristian Berg Harpviken, confirmó que será su hija, Ana Corina, quien reciba el galardón. También leerá el discurso escrito por la propia dirigente, con el objetivo de mantener su mensaje en el centro de la ceremonia. La decisión busca preservar el espíritu del reconocimiento. Las delegaciones diplomáticas siguieron con atención la modificación inesperada.

A pesar de las especulaciones, el Instituto Nobel insistió en que no espera un
cambio de último minuto. Señaló que el protocolo está completamente definido y
que la ausencia, aunque sorpresiva, no altera la formalidad del acto. En Oslo,
analistas y periodistas internacionales remarcaron la rareza de un faltazo de esta
magnitud. El misterio continúa mientras la ceremonia avanza con Milei ya presente.