Oriana Sabatini y Paulo Dybala vivieron una Navidad diferente a la habitual, marcada por la distancia de sus seres queridos. La pareja pasó las fiestas lejos de Argentina, específicamente en Europa dado los compromisos profesionales del futbolista con su equipo La Roma. Aunque el contexto fue distinto, ambos dejaron en claro que la fecha tuvo un significado especial.
A través de las redes sociales, Oriana Sabatini compartió algunos momentos de la celebración, donde se los vio relajados y cómplices. Sin grandes producciones ni reuniones multitudinarias, apostaron por una noche íntima y sencilla. El clima fue de calma y conexión, lejos del ruido habitual de las fiestas. “Feliz Navidad a todos. Que puedan disfrutar con sus familias y amigos. Nosotros disfrutando la última de a dos” fueron sus palabras en Instagram.
La ausencia de sus familias no pasó desapercibida para los seguidores, que rápidamente notaron el cambio. Sin embargo, la cantante dejó entrever que la distancia no opacó el espíritu navideño. Por el contrario, la pareja aprovechó la ocasión para reforzar su vínculo en un contexto más personal.
Oriana Sabatini en su embarazo de Paulo Dybala
Paulo Dybala, enfocado en sus compromisos profesionales con la Roma, también optó por un perfil bajo durante la celebración. La Navidad encontró al futbolista en un momento de introspección, priorizando el descanso y el equilibrio emocional. Esta elección reflejó una etapa de mayor madurez en su vida personal.
Lejos de los grandes festejos, la pareja demostró que las tradiciones pueden adaptarse. Para ambos, lo importante fue compartir el momento juntos, aun estando lejos de casa. La decisión evidenció una forma distinta de vivir las fechas especiales. Y es que en declaraciones pasadas, Catherine Fulop contó que Ori se siente muy sola en Europa ya que Leandro Paredes y Camila Galante se fueron del país y era quienes la acompañaban en todo momento.
Una vez más, Oriana Sabatini y Paulo Dybala mostraron que su relación se basa en el acompañamiento mutuo. Aunque la distancia física con sus familias fue inevitable, lograron transformar la Navidad en un espacio de intimidad y calma. Una celebración distinta, pero cargada de significado.

