Moria Casán volvió a sorprender a la audiencia en su programa de Canal Trece al hablar con total franqueza sobre su vínculo con su hija, reflexionando sobre cómo encara hoy su rol como madre y el deseo de acompañarla en todos los aspectos de su vida. Con su habitual estilo directo, la diva expuso emociones, experiencias personales y decisiones económicas del pasado que aún influyen en su manera de relacionarse con ella.
Durante la charla, Moria Casán reconoció que siente una necesidad profunda de sostener a su hija y brindarle apoyo constante, especialmente en el plano material. “Sí, a mí también. A mí me gustaría mantener a mi hija toda la vida. Yo quiero que no pida, me gusta ofrecerle todo”, expresó, dejando en claro que su impulso de protección está atravesado por situaciones que vivió y que la marcaron.
Luego sumó una revelación que generó impacto entre los televidentes, al admitir que algunas decisiones administrativas y delegaciones financieras tuvieron consecuencias en su patrimonio. “Me ha faltado mucho dinero por delegar y no estar en determinadas cuentas. No es que me equivoqué, no lo siento culpa pero sí ha sido irresponsabilidad mía. No me han dejado en la calle ni mucho menos pero sí me ha faltado un dinero importante”, confesó con honestidad.
A partir de esa experiencia, la conductora explicó que hoy busca compensar aquello poniendo el foco en el bienestar de su hija. “Siento que lo tengo que compensar ofreciéndole a mi hija todo. Todo. Si fuera por mí, no quiero que trabaje más”, afirmó, dando cuenta de una maternidad atravesada por el afecto, la autocrítica y un fuerte sentido de reparación.

