Durante una entrevista Miguel Ángel Pichetto arremetió contra la apertura de importaciones, advirtiendo que la medida pone en riesgo a la industria nacional y al empleo argentino. En ese sentido, en diálogo con Jorge Rial por Radio 10 manifestó: «Hagan mierda todo”.
Economía, recesión y competencia china
Pichetto criticó la falta de competitividad del dólar y el encarecimiento del turismo local. Señaló que la recesión y la apertura indiscriminada de importaciones chinas afectan la industria. Cuestionó la entrada de ropa usada al país y alertó sobre riesgos sanitarios. Afirmó que la situación provoca cierre de empresas y pérdida de empleo. Consideró que los sindicatos reaccionaron tarde ante la caída salarial.
Dijo que sectores industriales como Techint ya perciben el impacto del acero importado. Apuntó a que los productos chinos ingresan a precios de dumping para desplazar la producción local. Sostuvo que esta dinámica compromete el empleo argentino. Criticó que el Gobierno no implemente medidas de protección. Aseguró que la industria nacional atraviesa un escenario «demencial».
También cuestionó la política salarial y el deterioro del empleo público. Afirmó que la actualización salarial está muy por debajo de la inflación. Señaló que el ajuste impacta en trabajadores estatales y privados por igual. Denunció que cerca de 100.000 empleados públicos fueron despedidos. Advirtió que la situación seguirá agravándose.
Escenario político y tensiones con gobernadores
Pichetto sostuvo que el Gobierno no tiene mayoría parlamentaria y requiere acuerdos. Sin embargo, consideró que la estrategia oficial es avanzar sin negociar. Advirtió que los gobernadores deben entender que el oficialismo irá por sus territorios en 2027. Señaló que cualquier apoyo actual será usado en su contra más adelante. Evaluó que las próximas discusiones legislativas serán decisivas.
El dirigente afirmó que el peronismo perdió terreno y carece de una propuesta clara. Cuestionó que su discurso esté agotado y alejado de una visión productivista moderna. Aseguró que para reconstruir competitividad electoral es necesario un debate profundo. Rechazó consignas vacías y pidió ideas orientadas al desarrollo. Sostuvo que debe surgir un centro nacional renovado.
También hizo referencia a la relación entre Javier Milei y Mauricio Macri. Afirmó que el Presidente utilizó políticamente al exmandatario. Aseguró que buscó acomodarlo en un rol humillante. Consideró que el vínculo mostró la lógica de acumulación total del poder. Advirtió que esta dinámica persistirá con aliados y opositores. Señaló que no se comprende bien la estrategia del oficialismo.
