Un momento cargado de sentimientos fue el que se vivió en Otro día perdido, el programa que lleva adelante Mario Pergolini a través de la pantalla de Canal Trece. Allí estuvo como invitado uno de los actores más importantes de su generación, como es el caso de Luciano Cáceres, quien conmocionó a todos al contar lo que vivió con su madre en momentos de agonía.
«Mi mamá tuvo muchos años cáncer y el último año decidió abandonar todos los tratamientos. Y solo hacer terapias alternativas y hacía reiki. Cuando mi vieja cae en coma, me recontra enojé con el reiki», comenzó manifestando el artista delante de los televidentes.
«La llamé a la señora del reiki, y le dije: ‘Mi mamá está en coma, vení a hacer algo. Mi vieja salió del coma, pero ya no hablaba, y yo la escuchaba la voz. Y venían a preguntarme a mí qué tenía. Le pregunté qué hacía y me dijo: ‘Estoy agarrando a mi ángel, que es una persona muy alta, muy blanca, como de 50 años, que se llama Amor'», sostuvo.
Inmediatamente, Luciano Cáceres fue por más delante de Mario Pergolini. «Mi vieja se moría y traigo a alguien del reiki que quería mi vieja. Entra la señora y al minuto sale y me dice: ‘yo no puedo hacer nada, tenés que entrar vos’. Yo enojadísimo con el reiki», reveló.
«Entro, le pongo las manos en las piernas y empieza a mover las piernas, abre los ojos y ahí le digo que se agarre fuerte a su ángel y ahí mi vieja partió. Cuando preparo la cena, estoy caminando por el mar, ocho y media de la noche, y una ola, en este pie, me pone este rosario. Y yo lo guardé, como un regalo el mar», afirmó.
«Obviamente sentí que era de mi madre, pero lo guardé porque era muy loco. Esto me hizo creyente. Voy a la mina de reiki y me dice: ‘Tengo un mensaje para vos. Tu mamá hizo mucho esfuerzo para que ese rosario llegue a tus pies’. Y desde ahí, 17 años después, me lo puse y lo llevo. No sé, creer o reventar», sentenció Luciano.
