River decidió anticiparse al inicio del mercado y activó un operativo que apunta directamente a reforzar el costado izquierdo de la defensa. Aunque la prioridad sigue siendo Julio Soler, la dirigencia abrió otro frente de negociación para evitar quedar expuesta ante un posible contratiempo y cumplir con los pedidos de Marcelo Gallardo, que considera urgente sumar un lateral en este receso.
River reactiva contactos y busca evitar sorpresas
Dentro de la agenda que maneja Stefano Di Carlo, surgió con fuerza el nombre de Elías Báez, futbolista de San Lorenzo, quien aparece como una alternativa inmediata ante la chance de que Soler permanezca en la Premier League. El encargado de fútbol ya mantuvo charlas preliminares con el Ciclón, aprovechando la buena predisposición del club azulgrana para negociar.
La operación tomó impulso porque Báez combina dos factores que River valora en este momento: un costo de transferencia accesible y un perfil que encaja con lo que pretende Gallardo. Sin embargo, ese escenario favorable empezó a tensionarse frente a un protagonista inesperado que apareció en los últimos días.
Atlanta United mete presión y complica el plan
En medio de estas conversaciones, Atlanta United irrumpió en la disputa con intenciones concretas de acercar una propuesta, lo que podría elevar el precio y alterar los tiempos que maneja River. Esta situación obligó a Núñez a reaccionar rápido para no perder terreno en un mercado donde cada movimiento puede definir el desenlace.
El periodista Sebastián Srur aportó un dato clave para entender el panorama actual: “Aparte de Soler, por las dudas si se cae lo del ex lateral de Lanús, River también negocia por Elías Báez, de San Lorenzo. Sin embargo, le apareció un rival fuerte en lo económico, debido a que Atlanta United también sondea la situación”, detalló en las últimas horas, dejando en claro que nada está cerrado.
El valor del pase y la decisión final
Según cifras actualizadas en plataformas especializadas, el marcador de punta está tasado en 3.5 millones de dólares, un monto que River podría afrontar, pero que se volverá más exigente si Atlanta formaliza su interés. De ese equilibrio dependerá si la Banda avanza definitivamente o si modifica prioridades dentro del presupuesto aprobado para este mercado.
La dirigencia sabe que el margen de error es mínimo. Gallardo pidió aceleración, y por eso River mantiene abiertas todas las puertas mientras define si Báez será la llave para resolver una de las necesidades más urgentes del plantel.
