El mayorista de productos de limpieza Caromar, con más de 30 años de trayectoria, cerró de manera sorpresiva tres de sus sucursales: San Justo, Burzaco y Mar del Plata. La medida afectó a casi un centenar de empleados, quienes se encontraron con las puertas cerradas sin aviso previo.
La empresa pretende pagar solo el 50% de las indemnizaciones, alegando “fuerza mayor” para encuadrar los despidos bajo el artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo.
Desde el Sindicato de Empleados de Comercio rechazaron la maniobra y exigen el pago completo. “No permitiremos que se utilicen falsas causales legales para perjudicar a quienes han sostenido la empresa durante años”, advirtieron.
Testimonios de los trabajadores
Marcos, uno de los empleados afectados en San Justo, relató a C5N:
“Llegamos a nuestro horario habitual y nos encontramos con las puertas cerradas, candados y seguridad privada. Nadie nos avisó, nadie nos explicó nada. Esto nos deja sin sueldo y sin indemnización”.
Con 30 años de edad y dos hijos a cargo, Marcos destacó el impacto personal y familiar de la medida y alertó sobre la incertidumbre que atraviesan sus compañeros con décadas de trabajo en la empresa.
Protestas y medidas sindicales
Los gremios locales, incluidos FAECyS, SECZA y SEOCA, intervinieron rápidamente. Se desarrollaron manifestaciones y audiencias de conciliación ante el Ministerio de Trabajo, aunque hasta el momento no se registraron soluciones concretas para los afectados.
Crisis económica y ajuste empresarial
Los trabajadores denuncian que la empresa atraviesa un cierre repentino e injustificado, pese a que mantiene actividad en otras sucursales. Atribuyen la situación al contexto económico actual y al ajuste general que impacta en empresas de consumo masivo.
