Mientras el año futbolístico de River llega a su fin, la dirigencia ya activó el mercado de pases pensando en 2026. Las recientes bajas dejaron al equipo con huecos importantes, especialmente en la mitad de la cancha, donde la salida de Enzo Pérez obligó a moverse rápido. En ese contexto, el nombre de Fausto Vera tomó fuerza hasta transformarse en la prioridad del cuerpo técnico.
El gesto que cambió todo
La posibilidad de que el argentino salga de Brasil ya venía siendo evaluada, pero un movimiento inesperado terminó por destrabar la operación. Según reveló Sara Sklate, “Fausto Vera se despidió de sus compañeros de Atlético Mineiro”, un dato que en el mundo River fue interpretado como la señal definitiva de que el acuerdo está prácticamente encaminado. El club brasileño analizaba una venta total de su ficha, lo que facilitó aún más las negociaciones.
Gallardo lo quiere cuanto antes
Marcelo Gallardo había marcado desde el inicio del mercado que necesitaba un volante central de jerarquía. Y aunque se barajaron varias alternativas, Vera fue el que más terreno ganó por su presente, su proyección y la buena predisposición del jugador para concretar su regreso al fútbol argentino. La dirigencia, encabezada por Stefano Di Carlo, avanzó en silencio hasta lograr el escenario ideal para cerrar todo.
Lo que se viene
En los últimos días, Renzo Pantich ya había adelantado que Vera era el refuerzo más cercano a concretarse, sobre todo después de la reunión entre el representante del futbolista y los directivos en el Monumental. El entendimiento entre las partes parece estar prácticamente sellado, por lo que el Millonario podría anunciar a su primer refuerzo en cualquier momento.
