Sebastián Pareja cuestionó el endeudamiento de Axel Kicillof y apuntó contra legisladores de Pro por un apoyo que calificó como “flojo moralmente”. Recordó una charla previa con Diego Santilli y advirtió que el episodio abrió una crisis dentro de la alianza. Según dijo, aún quedan explicaciones pendientes sobre esa votación clave.
Crisis por el endeudamiento de Axel Kicillof
La votación del endeudamiento de Kicillof generó una tensión inesperada en la oposición. Sebastián Pareja señaló que el artículo dos de la ley de financiamiento presentaba un riesgo por su redacción “confusa y discrecional”. Según explicó, ese punto habilitaba al gobernador a manejar fondos sin garantías claras sobre su destino. Por eso, LLA decidió no acompañar la iniciativa pese a la presión política.
El dirigente recordó que, dos días antes de la sesión, se reunió con Diego Santilli en Casa Rosada. El encuentro giró en torno al Ministerio del Interior tras las salidas de Guillermo Francos y Lisandro Catalán. Allí, Santilli anticipó que Pro apoyaría el rollover de la deuda. Pareja insistió en que no hubo una estrategia común. Cada espacio tomó sus decisiones sin coordinación previa.
Dudas, acusaciones y “radio pasillo”
Tras la sesión, algunos legisladores denunciaron que parte de los votos de Pro respondieron a un acuerdo que incluía cargos estatales. Pareja se mantuvo cauto. Dijo que no tuvo acceso al detalle nominal de la votación y que no puede acusar sin certezas. Aunque admitió que “algo hubo”, definió esas versiones como “radio pasillo”. Aun así, sostuvo que el resultado final fue “un desastre” para la provincia.
El diputado también mencionó que en Pro conviven disputas internas que influyeron en quienes denunciaron un presunto reparto de cargos. Señaló que algunas tensiones personales se arrastran desde hace tiempo. Más allá de esos matices, Pareja afirmó que varios dirigentes “estuvieron flojos moralmente” al respaldar el proyecto.
El rol de LLA y los límites del acuerdo con Pro
Consultado sobre el impacto político, Sabastián Pareja evitó hablar de ruptura. Admitió que hubo una crisis, pero aseguró que el entendimiento entre LLA y Pro sigue en pie. Según explicó, el acuerdo electoral ya cumplió su primera etapa y ahora se centra en la coordinación legislativa en el Congreso. En la Legislatura bonaerense, añadió, nunca se planteó formalmente armar un interbloque.
El legislador remarcó que el Fondo de Fortalecimiento de Inversión Municipal también condicionó la votación. LLA tiene dos intendentes y Pro más de una docena. Para Pareja, esa diferencia territorial explica parte del comportamiento político de los jefes comunales. “Tenían que mirar ese fondo”, afirmó.
Mirada al futuro
Pese al conflicto, Sebastián Pareja dio por garantizada la continuidad del trabajo conjunto. Aseguró que el objetivo compartido es competir para ganar la provincia de Buenos Aires en 2027. Sobre los nombres, señaló que la decisión quedará en manos del presidente Javier Milei. Dijo que su tarea será ampliar el espacio y acompañar al candidato que resulte elegido.
Por ahora, sostuvo que los legisladores de Pro deberán explicar por qué votaron el endeudamiento impulsado por Kicillof. Consideró que el gobernador dejó la provincia con mayor deuda y con una estrategia política pensada para apuntalar su proyecto nacional. Según Pareja, esa jugada obliga a revisar la relación entre los socios opositores.
