El ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, sostuvo que la reciente autorización de endeudamiento “solo cubre los vencimientos que dejó Vidal” y que Buenos Aires “debe hacer malabares” por la falta de apoyo de Nación. Aseguró que la gestión tuvo que afrontar pagos por USD 2.500 millones “con recaudación propia y sin financiamiento”, algo que calificó como “insostenible en el tiempo”.
Bianco, en comunicación con Modo Fontevecchia, fue directo y afirmó que la administración de Javier Milei lleva adelante “una política explícita de asfixia” contra la provincia. Recordó los recortes por casi 13 billones de pesos y la caída de la coparticipación. Además, remarcó el impacto de la recesión: “Cierran fábricas y cierran pymes”.
El funcionario repasó los meses previos a la aprobación del presupuesto. Destacó la “organización impecable” de las elecciones bonaerenses y sostuvo que el oficialismo logró “un muy buen resultado” pese a las tensiones nacionales. También defendió el desdoblamiento, al asegurar que permitió “evitar una polarización total” que, en la elección nacional, favoreció a La Libertad Avanza.
“La provincia está más desendeudada que en 2019”
Bianco aseguró que no buscan endeudarse para gasto corriente, sino para “pagar deuda heredada”. Indicó que cuando Kicillof asumió, la relación deuda/PBG era del 9%, y hoy es del 6%. “No pedimos nada extraordinario. Solo buscamos pagar lo que ya existe”, afirmó. También advirtió que la deuda en dólares tomada por la gestión Vidal dejó compromisos difíciles de afrontar sin acceso a divisas.
Austeridad, obra pública y administración diaria
Según Bianco, la provincia hoy es “la que menos gasta por habitante en la Argentina”. Recalcó que el gobierno bonaerense mantiene paritarias que sostienen el poder adquisitivo y sigue ejecutando obra pública, como rutas, escuelas y centros de salud. “Queremos usar los recursos propios para mejorar la vida de los bonaerenses, no para pagar deuda”, sostuvo.
El escenario político hacia 2027
Consultado por una hipotética candidatura presidencial de Axel Kicillof, Bianco evitó confirmarlo, pero adelantó que trabajarán para “construir una alternativa con esperanza” frente al deterioro económico actual. “La gente no llega a fin de mes y las empresas cierran todos los días. Hay que pensar un proyecto nacional”, dijo.
Deuda, pragmatismo y futuro
Bianco defendió la toma de deuda con fines productivos, no especulativos. Señaló que ningún país crece sin financiamiento y que las circunstancias actuales exigen pragmatismo. “No hay que enamorarse de los instrumentos. Hay que usarlos según la coyuntura”, afirmó, en una crítica indirecta al discurso del kirchnerismo más duro.
