La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, lanzó una dura advertencia a la comunidad internacional al asegurar que cualquier país que quiera acceder al petróleo venezolano deberá pagarlo. “Si quieren petróleo lo tienen que pagar”, afirmó, y remarcó que Caracas no permitirá el robo de sus recursos energéticos.
La funcionaria sostuvo que Venezuela defenderá su soberanía sobre el petróleo y el gas, y advirtió que no habrá concesiones fuera del marco del derecho internacional. “No se lo van a robar”, enfatizó durante una intervención transmitida por la televisión estatal, en la que apuntó directamente contra acciones atribuidas a Estados Unidos.
Rodríguez denunció que autoridades estadounidenses han cometido “crímenes internacionales”, incluyendo operaciones en el mar Caribe que calificó como ejecuciones extrajudiciales y actos de piratería contra bienes venezolanos. Según afirmó, esas acciones buscan apropiarse de recursos energéticos sin realizar ningún tipo de pago.

El trasfondo del conflicto energético
De acuerdo con la vicepresidenta, distintos argumentos como la lucha contra el narcotráfico o la defensa de la democracia fueron utilizados como excusa para encubrir el verdadero objetivo. En ese marco, señaló que el interés real es acceder al petróleo venezolano sin respetar las normas internacionales ni compensar al país.
Durante un acto con trabajadores del sector energético, Rodríguez fue contundente al remarcar que Venezuela no entregará “ni una molécula” de sus recursos sin una transacción legítima. Enfatizó que cualquier acuerdo deberá ser justo y respetar la soberanía nacional sobre los bienes estratégicos.
Tensión con Trinidad y Tobago
La vicepresidenta también respaldó la decisión del presidente Nicolás Maduro de suspender los acuerdos energéticos con Trinidad y Tobago. La medida se adoptó luego de denunciar la participación de ese país en un operativo militar estadounidense contra un buque que transportaba crudo venezolano.
“No hay acuerdos, no hay negociación, no habrá producción ni gas para Trinidad y Tobago mientras se mantenga esa agenda de hostilidad”, sentenció Rodríguez, dejando en claro que el conflicto abre un nuevo capítulo de tensión regional en torno al control y la comercialización del petróleo.
