El bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados tiene un nuevo presidente tras la renuncia de Máximo Kirchner a su cargo. Su nombre es Germán Martínez y es un punto medio entre peronismo y kirchnerismo que podría ser útil para lograr consenso dentro del oficialismo aunque en sus primeras declaraciones como jefe de bancada encendió la polémica entorno a Cristina Fernández de Kirchner y su postura.
Desde Casa Rosada, el diputado aseguró que quiere «discutir con los responsables del problema» interno que hay en el oficialismo por el principio de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) e instantes después anunció que «quiere dialogar» con Cristina Fernández de Kirchner y su hijo Máximo Kirchner, dos dirigentes que se han manifestado en contra de lo logrado por el presidente.
De esta manera, los principales acusados dentro del Frente de Todos por la interna son la familia Kirchner con el propio reconocimiento de Martínez. A pesar de esto, el funcionario desea que el vínculo con el expresidente del bloque «sea bueno» y que lo «ayude» en esta nueva tarea que debe realizar en busca de acuerdos con sus propios compañeros y opositores.
En este sentido, aclaró que «no empezó una nueva era ni un nuevo camino con él» sino que busca «prolongar» lo que hizo su antecesor. Desde mañana comenzará a trabajar en las sesiones extraordinarias y en la formación de comisiones para poder tratar todos los temas que impulsó Alberto Fernández hace algunos días atrás para así abrir paso al acuerdo con el FMI en el Congreso de la Nación.
Este tema será muy delicado a tratar ya que hay 15 diputados que pertenecen a La Cámpora y sus votos podrían ser negativos teniendo en cuenta las posturas de Máximo y Cristina Kirchner. De todos modos, Germán Martínez aspira a la «unidad» del bloque y el «acompañamiento» de la oposición para que no quede trunco el proyecto.