La tragedia que ocurrió en Hurlingham el día miércoles, y sigue, abrió un debate importante para el país. La política se hizo eso sobre la problemática del narcotráfico y las adicciones. En 2014 fue Cristina Fernández de Kirchner quien se expidió sobre la preocupante situación que atraviesa Argentina hace muchos años y se acrecienta cada vez más.
Hace pocos días, la vicepresidenta viajó a Honduras y participó de una conferencia donde se refirió al narcotráfico. En esa oportunidad, la exmandataria sostuvo que el tráfico de estupefacientes crece con gobiernos liberales ya que el Estado invierte poco. La austeridad estatal le da fuerza al narco a causa de que se hace cargo de las carencias y mediante eso, consigue más poder.
De igual manera, ya cuando era Presidenta abordó la problemática. En 2014, durante su segundo mandato, Cristina Kirchner le habló a la militancia e indicó: “Hay que terminar con ese mito, que todos saben que es una gran hipocresía, de que se drogan únicamente los pobres. Los últimos procedimientos que se hicieron desde el Ministerio de Seguridad se hicieron precisamente sobre bandas de narcotraficantes VIP”.
“¿Saben cuál es la gran diferencia? Como siempre, los narcotraficantes utilizan con los pobres drogas terribles de bajísima calidad, que le rompen la cabeza, los que tienen plata consumen de la buena”, añadió la expresidenta. Esta última frase se puede traer a la actualidad y dar una respuesta a por qué los adictos de Hurlingham fallecieron tras ingerir cocaína.
En su reflexión sobre un inconveniente que acarrea Argentina hace varios años, la vigente vicepresidenta no hizo diferencias: «Esto no significa que todo aquel que tenga plata sea un adicto. Así como nosotros decimos que nadie porque tenga plata es un adicto, que nadie diga que los pobres son los únicos adictos», sentenció la exmandataria.