A lo largo de los años, el taxi siempre ha sido uno de los medios de transportes favoritos de los ciudadanos que viven o transitan por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Sin embargo, en los últimos años el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, no les brindó ningún tipo de ayuda, ni subsidios, y hoy en día circulan un 60% menos de autos.
Se estima que hoy en día circulan unos 15.000 taxis por la Ciudad mientras que hace unos años atrás la cifra alcanzaba los 38.000 según Télam. Las causas de esta caída se deben a varios motivos aunque la pandemia, las aplicaciones ilegales y los aumentos en diferentes rubros que creó Rodríguez Larreta se llevan puesto a la mayoría de taxistas.
Con la llegada del Covid-19, muchos trabajadores del área se cambiaron de actividad y allí se notó el primer cambio significativo además de que durante varios meses, a pesar de ser considerados esenciales, la demanda cayó abruptamente y no era rentable salir a recorrer las calles de la Ciudad. Además, al no recibir ayuda estatal, los costos son solventados totalmente por el chofer.
Según comentó Fabián Buzzurro, taxista desde hace décadas, el aumento en los alquileres de los vehículos es una gran traba. Actualmente cuesta alrededor de $6.300 por día un taxi más el gas y la comida del chofer. Al sumar los gastos la cifra diaria asciende a casi $8.000 para los trabajadores, lo que se traslada a más de 12 horas de trabajo continuo.
Los aumentos, la segunda pandemia para los taxis
A todo esto hay que sumar el aumento de entre el 40% y el 50% que estableció Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad de Buenos Aires en lo que autopistas, Verificación Técnica Vehicular (VTV), licencias y estacionamientos respectan. Sin embargo, para los taxis la suba, en algunos casos, es del 30% aunque esto no modifica la cuenta final.
Hoy en día la renovación de la licencia sale $2.180 más otros $4.023 de VTV. A esto debemos sumarle la revisión anual del equipo completo de GNC, los peajes, estacionamiento y la suba en la baja de bandera, la cual alcanzó los $111 y $133 para los horarios nocturnos. Al sumar todos los gastos, las cuentas para los taxistas quedan chicas y el trabajo dejó de ser rentable.