A raíz de una inflación que no para de crecer, ciertos dirigentes proponen dolarizar la economía y uno de los que elaboró un proyecto de ley con esta idea fue Alejandro Cacace, un diputado de San Luis que pertenece a la agrupación Evolución Radical, liderada por Martín Lousteau. Sin embargo, hoy el exministro de Economía dejó en claro que no está a favor de que el dólar sea la principal moneda de la Argentina.
Esta mañana en diálogo con Jorge Lanata en Radio Mitre, Lousteau fue contudente y sostuvo que «yo estoy en contra de la dolarización de la economía» porque «es inviable en el corto plazo», aseguró y remarcó que «hoy no hay dólares para intercambiar la cantidad de pesos que andan circulando». Además, subrayó que «si se pudiera, sería una calamidad».
En esa línea indicó que «cada diputado es electo y tiene el derecho a presentar un proyecto» y precisó que «en este caso Alejandro Cacace lo hizo a título personal. Ninguno de los diputados de Evolución lo firmó». Lejos de quedarse callado, acerca de las diversas propuestas para salir de la crisis económica actual, aseveró que «hay un montón de ideas simplistas y populistas que andan circulando y cuyas consecuencias no se están analizando en profundidad».
«Las ideas que andan circulando no se aplican en ningún lugar del mundo», enfatizó y manifestó que «no estoy de acuerdo con que un país no tenga moneda». «Si hacemos eso, vamos a un punto de no retorno», advirtió e hizo hincapié en que «la moneda no solo tiene un impacto inflacionario, tiene impacto en un montón de otras cosas».
En ese sentido afirmó que «hay una irresponsabilidad colectiva en cuanto a cómo nos comportamos respecto al Estado» y sentenció que «eso hace que no tengamos moneda». «Entonces, si vos dolarizás y los argentinos nos seguimos comportando igual, vamos a explotar», alertó y recordó que «ya pasó con la convertibilidad, pero en este caso, explotaríamos peor». Por lo tanto, aseguró que «si vamos a hacer las cosas bien no hace falta dolarizar».
En ese contexto, consideró que «lo que tenemos es un problema de productividad de nuestro Estado» y agregó que «nosotros gastamos mucho más por cada argentino del dinero que recibe el Estado». «Por eso, la gente, con justa razón, se enoja con el Estado y con la política, resaltó y aclaró que «yo comparto la idea de que tenemos un Estado que funciona mal» pero recalcó que «lo último que tenemos que hacer es terminar de romper lo poco que funciona».
