La guerra entre Rusia y Ucrania sigue vigente y la situación en Europa es cada vez más tensa. Sin embargo, esto tiene repercusión en todo el mundo ya que entre ambos países se reparten una gran porción del trigo que se utiliza en todo el planeta. Frente al bloqueo de exportaciones, la Argentina sacó provecho e incrementó sus ventas de este producto aunque el Papa Francisco lanzó una advertencia.
«¡Por favor, que no se use el trigo, alimento básico, como arma de guerra!«, exigió el sumo pontífice según NA. En este mismo sentido alertó que «es muy preocupante el bloqueo de las exportaciones de trigo de Ucrania, de las que depende la vida de millones de personas, especialmente de los países más pobres» que no solo están situados en el Viejo Continente.
Además, pidió «que se hagan todo esfuerzo para resolver esta cuestión y para garantizar el derecho humano universal a la alimentación». Estas declaraciones llegaron horas después de conocerse que Rusia planea abrir las exportaciones a los países que no le han aplicado sanciones. Sin embargo, son una parte relativamente pequeña ya que toda la Unión Europea y parte de la OEA se unieron para votar.
¿Y si el mensaje del Papa Francisco es para la Argentina?
No casualmente la Argentina está atravesando un momento muy particular respecto al trigo. El Gobierno creó un Fondo Estabilizador para desacoplar los precios internos y que así no aumente el pan y sus derivados. Como si eso fuera poco, en Casa Rosada planean subir las retenciones para poder recaudar más dinero que permita bajar la inflación por el método de acumulación de reservas.
Por su parte, desde el campo rechazan todo este tipo de medidas y sostienen que el precio del trigo es internacional y debe regirse como tal. Esta pequeña interna que hay en Argentina entre ambos sectores también trajo consigo polémica y luego de que el Papa Francisco se muestre tanto del lado kirchnerista no sería extraño que también haya sido un apoyo para dicho sector.