Luego de que la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) decida avanzar con el sospechoso avión iraní-venezolano, la justicia federal también. En la tarde de hoy inspeccionaron la aeronave y se llevaron las dos cajas negras para una revisión técnica completa. La idea es ver el funcionamiento del avión, sus movimientos más recientes y poder saber si efectivamente están ligados a un ataque terrorista o no.
Los datos más relevantes para el organismo son conocer si en algún momento del viaje se apagó el Fly data recorder y voice recorder. Además, buscan conocer datos del vuelo, indicaciones de ruta y comunicaciones hacia diferentes cabinas tanto hechas como recibidas. Esto podría develar comunicaciones exteriores como también la negación de algunos aeropuertos para desembarcar.
La AFI sigue de cerca el caso ya que mientras tanto continúa el peritaje de celulares y computadoras confiscadas a los tripulantes. Se espera que antes del martes de junio ya se conozca el informe completo de cada dispositivo electrónico y sus comunicaciones. A todo esto, los 14 venezolanos y 5 iraníes que arribaron no pueden salir del país a la espera que se esclarezca su situación.
La AFI espera los informes internacionales
Mientras ambos peritajes avanzan, la AFI mantuvo contactos con Estados Unidos, Uruguay, Córdoba y Paraguay para conocer la ruta del avión. Según informó Télam, le pidieron a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del país nortamericano y al FBI saber qué tipo de sanción deberían aplicar al Boing 747 que llegó en caso de que se compruebe el ilícito.
Mientras tanto, Uruguay debe mandar un informe con los motivos por los que les negó el acceso a su país. Estas dos incógnitas podrían destrabar la causa aunque no será todo. También se está trabajando sobre los tripulantes y averiguando sus lugares de origen y si tienen causas o están relacionados a actividades terroristas como se dijo en un principio.
