José Luis Espert, diputado de Avanza Libertad, manifestó que hay que limitar la Asignación Universal por Hijo (AUH) para dejar de «financiar el aumento de la pobreza» con hijos no queridos. Hoy el plan es para familias con ingresos menores a 200.000 pesos mensuales y cada asignación no supera los $9.532 por cada hijo, aunque si es un chico o chica con discapacidad puede llegar a cobrar entre $23.881 y $31.046 dependiendo la zona de residencia e ingreso familiar.
«Hay que ponerle límites a los que reciben asignaciones universales por hijo. Acepto que el Estado le pague al que es pobre y tiene dos hijos, pero mas allá de eso, no puede ser que se siga financiando el aumento de la pobreza con hijos no queridos que van a ser violados, maltratados y que van a terminar siendo delincuentes», sentenció Espert en una entrevista para Todo Noticias (TN).
Desde la izquierda no dudaron en atacar al economista por sus polémicas teorías sin fundamentos basados en datos. «Una basura como Espert desnuda su ideología reaccionaria al decir que los hijos pobres terminan siendo delincuentes. ‘Hay que ponerle límite’, sí a estos fachistoides. En las calles, junto al Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) y el Frente de Izquierda y de Trabajadores (FIT-U)», disparó Alejandro Bodart.
Lo cierto es que para cobrar un plan de este tipo, la familia no puede ganar más de $200.000 pesos por mes. Además los padres no pueden tener un empleo formal o registrado. Solo se acepta adultos con monotributo social, desocupados o con trabajo informal. Por otro lado, cada hijo debe ser menor a 18 años, salvo que tenga algún tipo de discapacidad certificada, en ese caso no hay límite de edad. Cada hijo puede recibir entre $2.989 y $9.532 dependiendo la zona de residencia y los ingresos familiares totales.
Los últimos datos recabados en 2019 demuestran que las familias que cobran la AUH con más de 2 hijos engloba solamente al 20%. La mayoría de lo que acceden a este plan (52%) tienen un solo hijo. Incluso desde que se implementó en 2009 este subsidio ha bajado la cantidad de madres adolescentes de un 15,2% a 13,4%. Por lo tanto, es falso que los pobres quieren tener hijos para cobrar más dinero del Estado.