El ministro de Economía Sergio Massa adelantó que Argentina registró un nivel de desempleo del 6,7% en el segundo trimestre del año. Sus declaraciones se dieron en el marco del Council of the Americas (Consejo de las Américas) en Buenos Aires. En el primer trimestre del año, el desempleo fue de 7% y en el segundo trimestre del 2021 fue de 9,6%.
El adelanto del anuncio, previsto oficialmente para el 21 de septiembre, se da un día después de que miles de personas salieran a las calles a reclamar suba de salarios y más subsidios al desempleo y la pobreza para combatir la alta inflación que afecta el poder adquisitivo de los argentinos. En el día de ayer, la CGT salió a marchar en reclamo de paritarias libres y en contra de los formadores de precios.
Las declaraciones de Sergio Massa
«Tenemos que poner también en nuestra agenda una mejora en la distribución del ingreso y políticas más firmes en la lucha contra la pobreza. Los dos grandes motores de destrucción de la pobreza son el trabajo y la inclusión, el resto son parches. Como hombres de Estado, debemos garantizarla paz social y el orden macroeconómicos», sostuvo Sergio Massa.
La segmentación de tarifas y la discusión del Estado por los planes sociales son temas candentes en la agenda económica. Uno de los requerimientos del FMI para hacer cumplir el acuerdo y pagar la deuda de 45.000 millones de dólares es realizar un ajuste fiscal en el gasto público, algo que no cayó bien en determinados sectores, como las agrupaciones nucleadas en la Unidad Piquetera.
«Sin estabilidad macroeconómica, no hay paz social. Pero sin paz social no hay estabilidad macroeconómica«, afirmó el titular del Ministerio de Economía. Además, agregó que las tensiones se ven reflejadas en las decisiones que debe tomar el Estado y los privados a la hora de invertir». Por eso, Massa apuró las conversaciones con el campo la semana pasada para acelerar la entrada de dólares y amortiguar las confrontaciones con los productores.
Menos desempleo pero más pobreza
A pesar de haber una baja en las tasas de desempleo, la realidad con los salarios es distinta. La evolución de los sueldos en el primer semestre, según el Indec, exhibió un progreso de 34,3%, al tiempo que la inflación en el período fue de 36,2%. En consecuencia, en el primer semestre las remuneraciones cedieron 1,9 puntos de poder adquisitivo. Este comportamiento está erosionando mes a mes lo que era un resultado positivo ya que en la comparación interanual los salarios crecieron 67,7% contra una inflación de 64%.
La información oficial da cuenta que en junio las retribuciones en el sector privado subieron 5,1%, quedando a 0,2 puntos de la evolución de precios. En la comparación con junio del año pasado la suba es de 68,3%, manteniendo 0,6 puntos a favor. El comportamiento de los salarios en el sector público ofrece varias lecturas. En junio subieron 4,6%, 0,7 puntos debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC), pero acumularon en 12 meses un incremento de 72,6%, casi 8,4 puntos más que la inflación.
La peor situación es de los trabajadores informales. De acuerdo al informe del Indec, los salarios de los empleados no registrados subieron 4,6% pero en el año se ajustaron 58%, 6 puntos por debajo del aumento del costo de vida. El Gobierno había convocado para el 18 de este mes al Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) para analizar una actualización.
Por lo tanto, aunque Massa afirma que el desempleo alcanzó «niveles inesperados», teniendo en cuenta que hace dos años el mundo entero se sometió al confinamiento estricto, la precarización laboral está cada vez más a la orden del día. Por tanto, aunque hay un crecimiento en la capacidad productiva, el poder adquisitivo está cada vez más empobrecido frente a la realidad de la crisis.
