Hebe de Bonafini, titular de Madres de Plaza de Mayo, volvió a fomentar el odio con otra de sus frases poco democráticas, cuando le preguntaron sobre el avance de la derecha en el mundo y en Argentina. Sin demasiadas vueltas, Bonafini decidió que no quería hablar de lo que pensaran otros dirigentes opositores al kirchnerismo a los que calificó como «enemigos».
«Lo que dice el enemigo hay que ignorarlo públicamente y estar atento internamente. Somos una manga de bolu… que nos la pasamos hablando de ellos (la derecha argentina) y ellos están chochos», arremetió Bonafini en una entrevista para la radio AM 530. Los entrevistadores titubeaban permanentemente ante la sorpresiva respuesta y decidieron hablar menos de política para hondar en detalles superfluos sobre la vida personal de la jubilada.
«Ni loca voy a hablar y no voy a hacerle propaganda (a los enemigos) porque todas las radios y los periodistas lo repiten», remarcó la activista por los derechos humanos. Luego, desde la radio decidieron preguntarle sobre Cristina y su último alegato en la causa Vialidad, donde se defendió contra las acusaciones de los fiscales Diego Luciani y Rodrigo Mola.
«Cristina Kirchner es una estadista que sabe de todo y que recontra piensa lo que hace y lo que dice. Yo en el juicio de Schoklender soy la única imputada y todos los demás están sueltos con casas tremendas con un montón de guita y yo no tengo ni bicicleta. Yo soy la única que está embargada hasta la camiseta», disparó Hebe muy enojada.
«Por eso siempre pensamos que estos jueces que tenemos son unos chantas, fachos, nazis, musolinistas y todo lo que les puedas poner es poco. A los diputados les diría que voten lo que hay que votar y que laburen para convencer a los sueltos que andan por ahí para que voten (la ampliación de la Corte Suprema de Justicia)», insistió la dirigente de 93 años.