La Ciudad de Buenos Aires denunció a los padres de los alumnos que tomaron los colegios porteños. Con Soledad Acuña a la cabeza, ministra de Educación, la jurisdicción demandó a los tutores de los alumnos que prohíben las clases. La funcionaria aseguró que la demanda consta de transferirle a los padres el costo correspondiente al pago de sueldo de docentes por cada día sin clase.
El territorio gobernado por Horacio Rodríguez Larreta se está viendo afectado por la toma de 13 instituciones educativas. Siete de ellas están efectivamente tomadas, mientras que las otras seis escuelas habrá pernocte, cuenta NA. Ante la prohibición de que los demás alumnos cumplan su derecho a tener clases, el Gobierno porteño tomó cartas en el asunto.
Soledad Acuña, además de la denuncia, les envío una advertencia a aquellos alumnos que comandan las tomas en los diferentes centros educativos: «Van a tener que recuperar cada día de clases que pierden, dejan de tener la posibilidad de participar de otras prácticas educativas, otras series estudiantiles y salidas pedagógicas; pierden todo ese tipo de beneficios», aseguró.
«No soy una ministra que no dialoga, lo que no voy a hacer es aceptar la violencia y la coacción a través de una toma. No vamos a dialogar con estudiantes que estén tomando escuelas. Tuvimos la oportunidad de dialogar todo este tiempo y se negaron. Lo que es claro es que empiezan a regir otras reglas del juego», agregó confesando su intención de escuchar las problemáticas que plantean los estudiantes.
La funcionaria porteña responsabilizó a los padres que permiten que sus hijos lleven a cabo las tomas: «Esto es responsabilidad de las familias que autorizan a sus hijos a estar ahí. En el 2018 hubo 40 familias que fueron procesadas en la justicia porque esto es un delito», sostuvo. En el caso del Mariano Acosta ya fueron demandados 8 mayores por apoyar la toma.