El balotaje presidencial en Brasil cerró a las 17.00 de este domingo. Ahora, la expectativa está puesta en la difusión de los resultados oficiales, los cuales ya empezaron a conocerse a través del portal web de la Justicia Electoral del país vecino. Hasta las 17.47, se había escrutado el 19% de las urnas: la pelea es reñida entre el presidente Jair Bolsonaro y el líder del Partido de los Trabajadores (PT), Lula da Silva.
Apenas finalizó el tiempo para sufragar, las casillas de votación empezaron a transmitir sus resultados y a los pocos minutos ya había datos, pero muy poco significativos (apenas el 19,23%), que mostraban una extrema paridad entre ambos candidatos. No obstante, Bolsonaro se imponía con 11.657.059 (51,57%) votos por sobre Lula, que contaba con 10.945.747 (48,43%) votos.
La denuncia de Lula previo al cierre de los comicios
La jornada se desarrolló con normalidad en la mayoría de los estados, aunque el equipo de Lula denunció irregularidades en operativos de la Policía Federal de Carreteras, que -según la presentación- buscaban impedir el voto de los ciudadanos que querían hacerlo por el PT. El Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil rechazó las acusaciones y dijo que “en ningún caso” los procedimientos policiales perjudicaron el voto, aunque admitieron que sí pudieron demorarlo.
El presidente del TSE brasileño, Alexandre de Moraes, aseguró que los operativos policiales montados en distintos puntos del país no impidieron que los ciudadanos pudieran concurrir a votar. De todas formas, admitió que los procedimientos pudieron haber generado demoras para los ciudadanos, y detalló que habían sido programados con anticipación e informados al Tribunal por la Policía Federal de Carreteras.
“En algunos casos eso retardó la llegada de los electores, pero en ningún caso impidió que puedan votar”, afirmó Moraes en declaraciones a la prensa. De esta forma, rechazó el pedido de detención del jefe de la Policía Federal de Carreteras, Silvinei Vasques, solicitado por el equipo de Lula tras acusarlo de estar alineado con Bolsonaro.
Sobre el nivel de participación en la segunda vuelta, el titular del TSE señaló que de acuerdo a los datos del transporte público, que fue gratuito durante la jornada para facilitar los traslados, “la abstención debería ser menor” que la de principios de octubre. El equipo de Lula denunció que los operativos tenían como objetivo impedir el voto de quienes iban a acompañar al PT, ya que se dieron en el nordeste del país, zona en la que el exmandatario nacional tiene más respaldo.
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