España ha puesto en marcha un proyecto piloto para ayudar a las pequeñas y medianas empresas industriales a reducir la semana laboral al menos medio día sin reducir los salarios, en un intento de aumentar la productividad. Las empresas que soliciten la ayuda deberán diseñar formas de aumentar la productividad que compensen los sobrecostes salariales, según informó el Ministerio de Industria.
Estas mejoras deberán aplicarse en el plazo de un año, mientras que la empresa deberá mantener el programa durante al menos dos años. El debate sobre el llamado «modelo escandinavo», que sostiene que la productividad aumenta si se reducen las horas de trabajo, no es nuevo, pero cobró fuerza durante la crisis del coronavirus entre las empresas, el sector público y los políticos.
En el primer año del proyecto, el Gobierno financiará parcialmente los costes salariales de las empresas que reduzcan su jornada laboral y también ayudará a financiar la formación y el coste de las medidas para mejorar la productividad. Solo pueden formar parte del programa los trabajadores con contrato indefinido a tiempo completo y las mujeres deberán estar representadas en función de su proporción en la plantilla de la empresa.
Al menos el 30% de la plantilla deberá reducir su jornada laboral si una empresa tiene hasta 20 trabajadores, mientras que en una compañía con entre 21 y 249 empleados al menos el 25% de sus trabajadores debe formar parte del plan, informó Reuters.
El gigante español de las telecomunicaciones, Telefónica, ha ofrecido a sus empleados la posibilidad de trabajar cuatro días a la semana, ampliando un programa piloto en el que participaron inicialmente unos 150 trabajadores, pero a cambio de una reducción salarial del 12%