En la tarde de hoy, primero de enero del 2023, Luiz Inácio Lula Da Silva recibió la banda presidencial. Sin embargo, no fue un traspaso de mando convencional porque Jair Bolsonaro, quien era presidente de Brasil, se negó a realizarlo y se fue a Estados Unidos. Además, el vicepresidente saliente, Hamilton Mourao, se negó también y así todo quedó en mano de representantes de etnias y minorías.
En lo alto de las escalinatas de acceso al Palacio de Planatlo, el flamante jefe de Estado de Brasil recibió el mando. Quien se lo entregó fue una mujer afroamericana rodeada de representantes de etnias y minorías sociales. Luego de esto, se tomó de las manos con su vicepresidente, Geraldo Alckmin, y dedicó unas palabras a los espectadores.
En ese contexto, afirmó que combatirá «todas las desigualdades: las de la riqueza, las del acceso a la salud y la educación y las de género». Además, consideró que «la realidad del país salta a los ojos en cada esquina» y que él debe trabajar para revertir el país que le dejó Jair Bolsonaro. De esta manera inició el tercer ciclo de Lula Da Silva en el máximo cargo del país vecino.
«Juntos somos fuertes; divididos seremos siempre el país del futuro que nunca llega. No puede haber lugar para tanta desigualdad. La grandeza de un país reside en la felicidad de su pueblo y nadie es feliz en medio de tanta desigualdad», sostuvo el dirigente durante su discurso para dejar en claro una vez más que su gestión está centrada en trabajar sobre estas diferencias.
Lula Da Silva anunció ministerios contra la desigualdad
Con el correr de los minutos, el discurso de Lula Da Silva comenzó a extenderse hasta el punto donde anunció la creación del Ministerio de Igualdad Racial, la cartera de Pueblos Indígenas y el relanzamiento del Ministerio de la Mujer, tres aspectos que él considera fundamentales para combatir la desigualdad dentro de Brasil durante su mandato.
«Es inaceptable que sigamos viviendo con prejuicios, discriminación y racismo. Somos un pueblo de muchos colores, y todos deberíamos tener los mismos derechos y oportunidades. Nadie será ciudadano de segunda clase, nadie tendrá más o menos apoyo del Estado, nadie se verá obligado a enfrentarse a más o menos obstáculos sólo por el color de su piel. Por eso estamos recreando el Ministerio de Igualdad Racial, para enterrar la trágica herencia de nuestro pasado esclavista», anunció según NA..
También señaló que «hay que preservar su cultura, respetar su dignidad y garantizar su sostenibilidad. No son obstáculos para el desarrollo: son guardianes de nuestros ríos y bosques, y una parte fundamental de nuestra grandeza como nación. Por eso creamos el Ministerio de Pueblos Indígenas, para combatir 500 años de desigualdad».
Por último, reveló que relanzará el Ministerio de la Mujer. «No podemos seguir viviendo con la odiosa opresión impuesta a las mujeres, sometidas a diario a la violencia en las calles y dentro de sus propios hogares», manifestó el flamante mandatario. Así, Lula Da Silva recibió la banda de un sector social al cual buscará respaldar durante su gestión.