El juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa está llegando a su definición. A menos de diez días de que se conozca la sentencia para los ocho acusado de asesinar al joven Villa Gesell, comienza una semana definitoria. Este miércoles fue el momento de la fiscalía y calificaron el ataque como «sorpresa» y «a traición». Pidieron que se califique como «homicidio agravado«.
En Dolores se viven semanas de mucha tensión por el juicio a los ocho rugbiers acusados de terminar con la vida de Fernando Báez Sosa a causa de un ataque en manada. Después de tres semanas repletas de testimonios, se acercan dos jornadas determinantes para el desenlace del proceso. Los alegatos serán la próxima instancia.
Por el Tribunal Oral en lo Criminal 1° (TOC 1) pasaron testigos, policías, bomberos, peritos, familiares, amigos de la víctima y los acusados para acercarse cada vez más al veredicto. Los últimos días de las audiencias también se animaron a hablar los rugbiers. Lejos de responsabilizarse de los hechos, intentaron justificar su accionar catalogando los sucesos como «pelea».
Este miércoles tuvieron la posibilidad de expedirse los miembros del Ministerio Público. Cuando el Tribunal les cedió la palabra, Gustavo García se explayó: “Lo mataron todos, tal como estaba previsto. Ahí está la organización, lo de atacar sin ningún riesgo, Fernando estaba con sus amigos comiendo un helado de uva”. De esta manera se convenció de que fue «sorpresa y a traición«.
“Hubo 23 testigos presenciales del hecho y dicen que instantáneamente le pegaron a Fernando”, agregó el fiscal García. “Todos lo golpearon brutalmente a Fernando Báez Sosa, no nos quedemos sólo con los videos, sino que fue una parte. No hay ni agresión, ni riña, cuando hay un acuerdo premeditado de matar”, concluyó el representante del Ministerio Público.
