El presidente de Brasil Luiz Inácio «Lula» da Silva debió postergar su viaje a China por un problema de salud. El jefe del Palacio del Planalto tenía previsto volar en los próximos días hacia Beijing con una importante comitiva de empresarios para profundizar el vínculo con el gigante asiático. Sin embargo, se conoció que el jueves pasado debió ser internado tras ser diagnosticado con bronconeumonía bacteriana y viral.
Según informó el Gobierno brasileño, el mandatario «fue internado en la unidad del Hospital Sirio-Libanês – Brasilia, el 23/03/2023, con síntomas gripales». «Luego de la evaluación clínica se realizó el diagnóstico de bronconeumonía bacteriana y viral por influenza A y se inició tratamiento», señaló un comunicado oficial. Ante esta situación y por consejo médico, «el presidente Luiz Inácio Lula da Silva decidió posponer su viaje a China».
«Tras la reevaluación de hoy y, pese a la mejoría clínica, el servicio médico de la Presidencia de la República recomienda posponer el viaje a China hasta que finalice el ciclo de transmisión viral», agregó la información difundida. «El aplazamiento ya ha sido comunicado a las autoridades chinas con la reiteración del deseo de programar la visita en una nueva fecha», señaló el Palacio del Planalto.
La comitiva de Lula da Silva
Según confirmaron fuentes oficiales, la comitiva estaba conformada por un grupo de 240 personas. Entre ellas, se encontraban 24 diputados y seis senadores, además de ministros como el de Economía, Fernando Haddad, gobernadores, sindicalistas y unos 200 empresarios. Es la primera vez que Brasil manda a tantos representantes para un encuentro bilateral.
El propósito era demostrar a China el peso que tiene y seguirá teniendo en la agenda comercial del país. Desde hace 14 años, la nación asiática se ubica como el principal socio económico de Brasil. Entre los principales productos que el gigante asiático adquiere del sudamericano destacan la soja, la carne y los productos extractivos.