La Cámara de Diputados de la Nación dio el martes media sanción al proyecto del denominado “Monotrobuto Tecnológico”. Se trata de un esquema tributario que genera una categoría para que trabajadores individuales que exportan servicios al exterior, vinculados mayormente a la industria de la economía del conocimiento, cuenten con una herramienta para facturar y cobrar en dólares.
El monotributo tech será compatible con el Régimen General (inscripto en IVA, Ganancias y Autónomos), Régimen Simplificado (Monotributo) y empleados en relación de dependencia, siempre que la inscripción en éstos sea por desarrollar una actividad diferente a la que alcanza el flamante esquema. A continuación, los requisitos para acceder a este sistema, primeramente, son residir en Argentina y ser persona humana.
Otro factor a reunir es que los ingresos de los últimos 12 meses sean inferiores o iguales a una de las tres categorías dispuestas para el nuevo monotributo de hasta US$ 10.000, US$ 20.000 o US$ 30.000 anuales. Cabe remarcar que el proyecto prevé que, de acuerdo a la categoría elegida, aquellos que adhieran van a poder cobrar hasta ese monto sin tener que liquidar las divisas en el Mercado Libre de Cambios.
En tanto, estipula que, para mantener su adhesión, deberán depositar las sumas obtenidas por las actividades alcanzadas en una Cuenta Especial de Depósito y Cancelación. Desde el Poder Ejecutivo revalorizaron la iniciativa enumerando una serie de elementos por los que esta normativa impacta positivamente, como promover el trabajo registrado con acceso a obra social y aportes jubilatorios.
A qué apunta el monotributo tecnológico
De igual manera, el monotributo tech apunta a ampliar la recaudación de divisas; no tiene costo fiscal; y se posiciona como una medida inclusiva que aumenta los derechos entre los exportadores de conocimiento al exterior. Es “un enorme paso hacia la regularización financiera y tributaria de los gamers y programadores freelance que cobran en moneda extranjera y que desean tener sus ingresos en la Argentina”, sostuvo el ministro de Economía, Sergio Massa, tras la aprobación.
Por su parte, Ariel Sujarchuk, secretario de Economía del Conocimiento, analizó que se avanza en una Argentina que “amplía derechos e iguala oportunidades […] para que los profesionales, emprendedores y nuevos talentos facturen en dólares los servicios que exportan”. Y aseguró que, “al permitir hasta US$ 30.000 anuales en blanco, garantiza el derecho de todo argentino a trabajar en el marco de la ley”.
