El presidente de Brasil, Lula da Silva, fue criticado el lunes por Estados Unidos por sus recientes comentarios en los que sugería que Occidente había estado «alentando» la guerra al armar a Ucrania. Mientras que, por otro lado, fue elogiado por el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, por su propuesta de entablar conversaciones de paz.
En una visita a Brasilia, Lavrov se reunió con Lula y agradeció a Brasil sus esfuerzos para resolver el conflicto en Ucrania. Pero un portavoz de la Casa Blanca acusó a Lula de «repetir como un loro la propaganda rusa y china sin fijarse en los hechos». El brasilero se ha ofrecido como mediador en las conversaciones de paz para poner fin al conflicto de Ucrania. Esa propuesta se basaba en la tradición brasileña de no intervención y diplomacia abierta.
Pero Lula también ha enfadado a muchos en Occidente con sus comentarios del fin de semana, cuando pidió a las potencias occidentales que dejaran de suministro de armas para la guerra. Los comentarios se producen poco después de su regreso de China, donde trataron el asunto con el presidente chino Xi Jinping.
«Estados Unidos tiene que dejar de fomentar la guerra y empezar a hablar de paz», expresó Lula. También pidió que un grupo de países que no estén involucrados en la guerra entablen conversaciones de paz con Rusia y Ucrania. «Pero también tenemos que hablar con Estados Unidos y la Unión Europea. Es decir, tenemos que convencer a la gente de que la paz es el camino», agregó, replicó Reuters.
Hasta ahora, entre las naciones occidentales, solo el presidente francés, Emmanuel Macron, ha dado la bienvenida a la iniciativa. Lavrov dijo a los periodistas en Brasilia el lunes que Moscú estaba «agradecido a nuestros amigos brasileños por su clara comprensión de la génesis de la situación». «Estamos agradecidos por su deseo de contribuir a encontrar vías para solucionar esta situación», señaló.
John Kirby, portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, expresó el lunes que los comentarios de Lula eran «simplemente equivocados» y erraban el tiro al «sugerir que Estados Unidos y Europa no están de alguna manera interesados ??en la paz, o que compartimos la responsabilidad de la guerra».