“Massa se queda hasta el final, porque el final es cuando se vaya Massa», fue la frase que Malena Galmarini utilizó contra el Gobierno y los que dudan de su gestión. El posteo, cuya autoría es en realidad del economista Alejandro Kowalczuk, despertó malestar en medio de la fuerte escalada del dólar y la presión inflacionaria. Jonatan Viale fue uno de los que respondió duramente contra la esposa de Sergio Massa y titular de AySA.
«Lo que está haciendo Galmarini es avisarle al presidente que esto no va más. ‘O me dejan de molestar o me voy’. Y el metamensaje que plantea Massa es estabilidad, lo cual es una falacia enorme», recalcó en su columna editorial de Radio Rivadavia. «Lo único que hizo Massa como ministro es generar inestabilidad», agregó al destacar la disparada del dólar blue.
«Enfermos de poder»
Luego de recapitular tanto los manotazos de Massa como la actitud del número dos de Smata contra los empresarios, Jonatan Viale definió a los dirigentes del oficialismo como «enfermos de poder». «El enfermo, cuando ve que se cae, se lleva todo puesto. No soporta la caída. Por lo tanto, están llamando abiertamente a la violencia organizada», indicó.
Por eso, advirtió que al kirchnerismo «le va a costar dejar el poder», algo que quedó demostrado cuando Cristina Kirchner no quiso entregarle la banda presidencial a Mauricio Macri. «Para el kirchnerismo, la culpa de la inflación y del dólar volando no es ni de Massa, ni de Batakis, ni de Alberto, ni de Cristina. Es Magnetto, es el campo, es Milei», amplió el politólogo.
Aunque desde el Gobierno intentan tapar las culpas señalando a terceros, la interna ofrece cada vez más pistas sobre la verdadera responsabilidad del oficialismo en esta crisis. «El problema son estos funcionarios inútiles que se matan entre sí», dijo en torno a la interna entre Massa y Aracre. Ahora, el próximo es Pesce, señal de que la relación entre Alberto Fernández y Sergio Massa está debilitada.