Con golazos de Vinicius y Kevin De Bruyne, Real Madrid y Manchester City igualaron 1-1 por la ida de la semifinal de la UEFA Champions League. En ese encuentro, Pep Guardiola no realizó cambios y, por lo tanto, Julián Álvarez quedó en el banco de suplentes. Ante esta situación, el entrenador de los Citizen reveló los motivos de su decisión táctica.
El tanto del conjunto español llegó en el mejor momento de los ingleses y viceversa, ante esa situación, Pep comentó: “Fue un partido muy igualado. No ha cambiado la opinión que tenía del Madrid: es un equipo fantástico. Estamos en una eliminatoria que se decidirá en Manchester». Luego agregó: “No hay explicaciones para analizar lo que pasó. Es fútbol. Son partidos muy igualados, como ha sucedido el año pasado. Ahora debemos recuperarnos para preparar la Premier y la revancha contra el Madrid”.
“Los espacios entre Camavinga y Carvajal no fueron ocupados por los centrales, porque se quedaban con Erling (Haaland)”, explicó el estratega catalan consultado por el bloque defensivo del Merengue. “Erling tuvo que luchar con muy buenos defensores y esos espacios fueron ocupados por Valverde y Toni (Kroos). También estaba Modric que no nos permitió la creación de los espacios para el uno contra uno”, insistió.
De cara a la revancha del próximo miércoles 17 de mayo en el Etihad Stadium el entrenador manifestó: “El año pasado hemos jugado mejor en el partido de ida, cuando ganamos 4 a 3 y el Madrid salió más reforzado por el resultado que logró en Inglaterra. Nosotros sabíamos que íbamos a querer llevar la eliminatoria para el Reino Unido, porque será un encuentro terriblemente duro. Buscaremos defender mejor, ser más efectivos y tener mayor fluidez en el ataque”.
Por último, explicó por qué terminó el encuentro en la capital de España con los mismos once que saltaron al campo de juego: “Pensé que estaban bien los que estaban. Bernardo (Silva) y Jack (Grealish) fueron determinantes para retener el balón y darle continuidad al juego. El Madrid apela a la transición, especialmente con Rodrygo, Vinicius y Valverde, que son capaces de trasladar la pelota durante más de 40 metros. Si el partido se hubiese vuelto loco, nosotros no teníamos jugadores tan buenos con esas características. Por eso buscamos apelar a la pausa. También he pensado en hacer algún cambio, pero al final he decidido no hacerlo”.
