Dos esqueletos han sido hallados en las ruinas de Pompeya, la antigua ciudad romana arrasada por la erupción del volcán Vesubio hace casi 2.000 años. El Ministerio de Cultura de Italia informó que los esqueletos fueron recuperados de un edificio conocido como la «Casa de los pintores en el trabajo».
Según un comunicado, los restos son probablemente de dos hombres de unos 50 años que murieron en un terremoto que acompañó a la erupción. El director del Parque Arqueológico de Pompeya, Gabriel Zuchtriegel, dijo que no murieron por la ceniza volcánica, sino por el derrumbe de los edificios. Señaló también que se encontraron fragmentos de muros entre sus huesos fracturados.
«Las modernas técnicas de excavación nos ayudan a comprender mejor el infierno que destruyó por completo la ciudad de Pompeya en dos días, matando a muchos habitantes», explicó el arqueólogo alemán. Pompeya, a 23 kilómetros al sureste de Nápoles, albergaba a unas 13.000 personas cuando quedó sepultada bajo cenizas, guijarros de piedra pómez y polvo al soportar la fuerza de una erupción en el año 79 d.C. equivalente a la de muchas bombas atómicas.
Según el Ministerio de Cultura, «al menos entre el 15 y el 20% de la población» perdió la vida. En los últimos dos siglos y medio, los arqueólogos han recuperado los restos de más de 1.300 víctimas. El yacimiento de Pompeya ha experimentado recientemente una gran actividad arqueológica para poner fin a años de deterioro y abandono. En gran parte gracias a un proyecto financiado por la Unión Europea y dotado con 105 millones de euros, informó Reuters.
El ministro de Cultura italiano, Gennaro Sangiuliano, declaró que proseguirán los esfuerzos de conservación e investigación arqueológica. «El descubrimiento de estos dos esqueletos nos demuestra que todavía tenemos que estudiar mucho, hacer más excavaciones para sacar a la luz todo lo que todavía (se esconde) en este inmenso tesoro», dijo.