Los bomberos de Canadá advirtieron este miércoles que las ráfagas de viento y la baja humedad podrían alimentar un incendio forestal en Halifax que ha obligado a miles a evacuar y ha causado una mala calidad del aire a cientos de kilómetros de distancia en Estados Unidos.
El incendio, denominado Tantallon Fire, en la ciudad de Halifax, en el este de Canadá, creció en 49 hectáreas a 837 hectáreas desde el martes, informó David Steeves, del Departamento de Recursos Naturales de Nueva Escocia. «Hoy podría ser un día muy difícil», agregó este miércoles por la mañana, y señaló pronósticos de ráfagas de viento de 25 kilómetros por hora desde el sur y baja humedad.
«Hoy podría ser un día muy peligroso para la gente en el terreno», manifestó. El incendio, que se encuentra a unos 30 kilómetros al oeste del centro de Halifax, ya ha obligado a 18.000 personas a evacuar sus hogares. No se han reportado muertes, pero unas 200 casas y estructuras han resultado dañadas, informó CBC, citando a la Municipalidad Regional de Halifax.
Los incendios forestales también provocaron la evacuación de unas 400 viviendas en la provincia de New Brunswick durante el fin de semana, dijeron las autoridades. «Las historias y las imágenes que estamos viendo salir de Nueva Escocia y Nuevo Brunswick son desgarradoras», manifestó el primer ministro Justin Trudeau y prometió apoyo federal para las provincias del Atlántico, informó Reuters.
«Sabemos que la gente está extremadamente angustiada por lo que está pasando. Como gobierno federal estamos allí, estaremos allí para apoyar», agregó. El martes, los funcionarios de emergencia canadienses también emitieron una orden de evacuación obligatoria para partes de Bedford, Nueva Escocia, luego de que las autoridades notaron un nuevo incendio forestal y la posibilidad de una fuga de amoníaco en el área.