Un momento muy fuerte se vivió en «Noche Al Dente», el programa que lleva adelante Fernando Dente a través de la pantalla de América TV. El invitado fue nada más y nada menos que Roberto Moldavsky, uno de los humoristas más exitosos y queridos de nuestro país, quien rompió en llanto al momento de hablar de su madre, quien falleció años atrás.
Todo comenzó al escuchar que sonaba “Zamba para olvidarte». «Esto me lleva a Sara, mi vieja, que nos taladraba con Mercedes Sosa. Mi vieja era la persona que yo siempre digo…Vos entrás a lugares y te reciben de distintas maneras. Mi vieja siempre me recibía con una sonrisa. No importaba en la situación en la que ella estaba, siempre me regalaba una sonrisa, siempre. Me hace mucha falta mi vieja», comenzó diciendo.
«Soy un tipo grande, mi vieja se murió de grande. Se acostó a dormir y una noche no se despertó. Pero me enseñó el amor a Mercedes Sosa. Y, cuando Mercedes vino a cantar a Israel, bien a lo argentino, me inventé una credencial de periodista. Y entré a su camarín. Ella todavía estaba en el exilio, estaba viviendo en Alemania, y me contó que no le gustaba Alemania, le parecía muy frío. Y en Israel estábamos todos los argentinos y le cantábamos las canciones. Y ella dijo: ‘Me quiero quedar acá’. Y el hijo le decía: ‘Mamá, ¿estás loca? ¿Qué vamos a hacer nosotros en Israel?’», lanzó Roberto Moldavsky.
Conmovedor
«Mercedes Sosa es mi vieja, es estas canciones… Aprendí el amor a la Negra a través del amor de mi vieja. No se puede reemplazar. Mi psicóloga se enoja cuando le digo que alguien es incondicional. ‘No hay que ser incondicional’, me dice. Y mi vieja era incondicional. Cuando dejé el negocio (de ropa del barrio de Once) para dedicarme a ser artista, me miraba con cara de: ‘Por qué me hacés esto’. Cuando yo volvía del negocio, ella me llamaba y me preguntaba: ‘¿Se vendió hoy?’. Cuando pasé a ser humorista, todos los días me preguntaba: ‘¿Se rió la gente?’ Había días que yo ni tenía show, pero le decía: ‘Sí, se mataron de risa, no sabés cómo estaban…’”, afirmó.
«No me llegó a ver en lo de Mirtha Legrand, que ella la amaba. Un día la llevé por la calle Juan B. Justo para que vea un póster mío gigante. Y me dice: ‘Muy parecido a vos’», sostuvo, y realmente emocionado, contó cómo extraña a su mamá. «Y la verdad que uno ya está grande para llorar por un padre o una madre que se fue, pero mi vieja me hace mucha falta todos los días. La extraño mucho. La necesito, a pesar de que soy un bolud* de 60 años. Fue la persona que más me amó en la vida», finalizó.