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Polémica en Guatemala: suspenden al movimiento Semilla por adhesión ilegal de miles de ciudadanos

Un tribunal de Guatemala suspendió en la víspera a Semilla, poniendo en duda la participación de Berbardo Arévalo en el balotaje del 20 de agosto.

La Fiscalía Especial contra la Impunidad de Guatemala informó este jueves que allanó la sede del Registro de Ciudadanos para investigar la adhesión supuestamente ilegal de 5.000 ciudadanos al Movimiento Semilla, que abandera al candidato Bernardo Arévalo, mediante la falsificación de documentos.

Un tribunal de Guatemala suspendió en la víspera a Semilla, poniendo en duda la participación de Arévalo en el balotaje del 20 de agosto, poco antes de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) confirmara los resultados de la primera vuelta, que situaron al diputado anticorrupción en la segunda ronda.

La investigación, que incluye «diligencias de allanamiento, inspección, registro y secuestro de evidencia» en el registro electoral, fue en respuesta a la denuncia de un ciudadano que dijo haber sido adherido ilegalmente a Semilla. Al menos 12 personas fallecidas habrían sido inscritas en el grupo político, según la Fiscalía.

Arévalo dijo que impugnaría la suspensión de su partido, que según él viola la ley guatemalteca, ya que un partido político no puede ser suspendido en medio de una elección. El fiscal Rafael Curruchiche, cuya oficina contra la impunidad solicitó la suspensión de Semilla, ha apuntado previamente a activistas anticorrupción y ha sido incluido en la «Lista Engel» del Departamento de Estado de Estados Unidos por «actores corruptos y antidemocráticos».

En las elecciones generales celebradas el pasado 25 de julio, Sandra Torres (15,86%) y Bernardo Arévalo (11,77%), hijo del expresidente reformista Juan José Arévalo (1945-1951), fueron los más votados entre los 22 aspirantes. Torres, candidata de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), inició de hecho su actividad proselitista para agosto, informó Reuters.

Varios partidos alegaron supuestas irregularidades y la Corte de Constitucionalidad impidió al TSE oficializar los resultados hasta que se realizara un cotejo de las actas electorales, trámite que fue cumplido y que reveló apenas cambios menores en el número de votos de cada fuerza.