Este domingo se llevó a cabo el segundo debate presidencial y, al igual que el primero, existieron chicanas, risas y acusaciones entre los candidatos. A menos de 15 días para las elecciones presidenciales, Sergio Massa, Javier Milei, Patricia Bullrich, Juan Schiaretti y Myrian Bregman se vieron las caras por última vez antes de competir en las urnas.
La Facultad de Derecho fue testigo del segundo debate presidencial. Los primeros cuatro en exponer hicieron mención de lo acontecido en Medio Oriente. Javier Milei, Patricia Bullrich, Sergio Massa y Juan Schiaretti enviaron su solidaridad al pueblo de Israel. Por su parte, Myriam Bregman se posicionó en favor de Palestina y comenzó chicaneando al candidato de La Libertad Avanza. Al cual había tildado de «gatito mimoso» en Santiago del Estero, esta vez lo calificó de «derecha un poco despeinada».
El primer bloque fue destinado a la seguridad y Patricia Bullrich fue donde más cómoda se sintió. Allí, aprovechó para recordarle a Massa el polémico viaje de Martín Insaurralde: «Massa, hace 4 años que estás en el Gobierno, no hablés de Tigre. Parece una vergüenza que hace 4 años que estás con el Gobierno y aumentaron los homicidios en Rosario, liberaron a todos los narcos, generó la peor crisis de seguridad en la Argentina. ¿Tus números quién te los da? ¿Insaurralde, que te dijo que el yate valía 500 mil pesos?«, disparó.
En contrapartida, el ministro de Economía fue contundente: «Con respecto a Insaurralde, le pedí la renuncia al cargo y a la candidatura. Y no todos somos lo mismo. Vos nunca le pediste la renuncia a Gerardo Milman«, respondió. Gerardo Milman es uno de los dirigentes más allegados a la candidata de Juntos por el Cambio y es uno de los supuestos involucrados en el atentado a Cristina Kirchner.
La tensión volvió a reinar cuando le tocó el turno a Javier Milei de preguntarle a Patricia Bullrich. El candidato de La Libertad Avanza aprovechó para interrogarla sobre la reunión que mantuvo Carlos Melconian, su candidato a ministro de Economía, con Sergio Massa. Sin embargo, la exministra de Seguridad decidió no responderle y contragolpeó con Luis Barrionuevo.