Diego Santilli anticipó que Juntos por el Cambio deberá acompañar a las decisiones de Javier Milei y aclaró que no serán oposición. El diputado nacional llamó a la reflexión a aquellos miembros de su espacio que se quieren ubicar como «opositores». Remarcó que los disidentes al gobierno de Javier Milei serán quienes responden a Cristina Kirchner.
El exprecandidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires expuso cuál será su posicionamiento a partir del 10 de diciembre: «Somos un país que está en coma, en coma hace rato. El respirador nos va llevando pero, no nos resuelve la situación de fondo. El PRO, Juntos por el Cambio quiere ayudar a que las transformaciones sucedan. Eso significa tomar decisiones, significa colaborar», anunció en TN.
«De esas dos alternativas ganó la de Milei y dijo que iba a hacer lo que la política no quiso, no supo o no pudo hacer y estamos como estamos. Somos un país que está alineado a países que no son del contexto democrático y de la realidad de la Argentina. Somos un país que gasta muchísimo más de lo que ingresa, un país que tiene 40% de pobres», justificó el exvicejefe de Gobierno.
Allí, Diego Santilli marcó diferencias con compañeros de espacio que quieren colocarse como opositores: «Disiento con algunos que dicen que somos oposición. La oposición es el kirchnerismo. Juntos por el Cambio es una alternativa. Nosotros tenemos que tener claro que tenemos que ayudar y que somos una alternativa que la tenemos que ir construyendo, regando», sostuvo.
Al mismo tiempo insistió en que Javier Milei debe recibir el apoyo de Juntos por el Cambio para tener gobernabilidad y llevar a cabo su plan: «Necesita apoyo, ayuda, hay que ayudarlo, lo tenemos que acompañar. Le tenemos que dar esos meses. Tenemos que ayudarlo a que transforme. Haciendo lo mismo, vamos a tener los mismos resultados en Argentina«, enfatizó.
En relación a cómo se encuentra JxC, Santilli no ocultó las diferencias que se profundizaron tras las elecciones: «Tenemos un lío bárbaro. En 2019 estábamos muy unidos porque ganó el kirchnerismo. En ese momento nos unió el espanto y era más fácil mantenernos unidos. La reunión con los gobernadores, más allá de los chispazos, es conservar su identidad. Sepamos que la sociedad pretende un cambio», concluyó.
