Carlos Ruckauf fue contundente a la hora de referirse al cambio de Gobierno que ocurrió el día domingo. Aseguró que se fue una administración de «mentirosos» y arribó a la Casa Rosada «un tipo que dice la verdad». Al mismo tiempo, el exvicepresidente denunció que Alberto Fernández tiene un plan que podría costarle mucho dinero al Estado.
El exgobernador de la provincia de Buenos Aires comparó al mandatario saliente con el flamante Presidente. En ese sentido recordó cuando vaticinó un triunfo de Javier Milei: «Creyeron que estaba haciendo una campaña. En realidad estaba describiendo a un personaje. Hace dos años dije que si el Gobierno de estos payasos que se van, Milei es presidente. Se va un mentiroso y llega un tipo que dice la verdad«, indicó en A24.
«Es muy importante tener en cuenta que queda al frente de la oposición Cristina Fernández de Kirchner. Fue a La Plata y estuvo en el palco. Es muy importante y significativo dentro de la estructura de poder. Fue y le tiró un beso a Kicillof, quien es su hijo político», advirtió Carlos Ruckauf haciendo referencia a la jura del gobernador bonaerense.
Seguidamente denunció a Alberto Fernández por tener un plan que conllevaría un gasto por parte del Estado: «Lo que planea le cuesta 200 mil euros por mes a la República Argentina, un país con hambre y miseria. Este caradura -Alberto Fernández- pretende llevarse a España un equipo policial, alquilar movil, alquilar un local, tener pasajes de ida y vuelta para ese personal que se va a renovar cada 15 días y pagar 300 euros de viático diarios«, explicó.
Sin embargo, el exvicepresidente confesó que la seguridad es un derecho que tienen los exmandatarios: «Este decreto establece que los presidentes y los vicepresidentes tenemos derecho a tener custodia en el exterior. Rechazo que en cualquier viaje de mi vida nadie me acompañe y me pague el Estado lo que tengo que pagar con mi trabajo».
Como conocedor del poder en Argentina, Carlos Ruckauf observó una falla en la custodia de Javier Milei el día de su asunción. Apenas unos centímetros lo salvó de se impactado por una botella. «Una persona que arroja algo debe ser abatido de inmediato porque puede lanzar una botella, pero también puede ser una granada«, concluyó.
