José Luis Espert, diputado de Juntos por el Cambio, afirmó que todo plan económico debe funcionar bajo un orden institucional, por lo tanto, el caos en las calles no puede estar encima de la paz. En ese marco, Espert señaló que el plan de Patricia Bullrich para controlar las calles con el protocolo antipiquete es una apuesta audaz para encaminar el orden.
«Me reuní con el presidente, Javier Milei y veo que de a poco se va a armando el plan económico con medidas de ajuste fiscal que ya se anunciaron y en breve se va a publicar el DNU con un proceso de desregulación muy importante y en el Congreso recibiremos el paquete de medidas estructurales que pienso que tendrá una reforma laboral», sentenció Espert en una entrevista para la radio CNN.
«Si uno mira el paquete de Luis Caputo el 40% de la ajuste fiscal lo hace la política como la reducción de las transferencias discrecionales a provincias, la disminución de la cantidad de ministerios y el fin de la intermediación de planes sociales, y el 60% lo hace el sector privado. Pienso que las transferencias a provincias debería cortarse definitivamente y también hay que terminar con el déficit de las empresas públicas», relató el economista.
El enojo de Espert con los piqueteros
«Si no impera la ley, impera la ley del más fuerte. El protocolo de Bullrich pretende armonizar el derecho a transitar y el derecho a protestar y sabemos que cualquier plan económico debe funcionar bajo el orden. Los planes sociales deben ir directo a los beneficiarios y no a los intermediarios», señaló el fundador del partido Avanza Libertad.
«Sabemos que se vienen meses duros entre diciembre y marzo porque vamos acumular cerca de un 100% de inflación, pero no puede ser que el caos en las calles esté por encima de la paz y el orden o que el que no quiere manifestarse termine siendo rehén de los que se quieren manifestarse», comentó el dirigente político de 62 años.
La combinación de medidas de ajuste fiscal, desregulación y reformas laborales previstas, según Espert, busca lograr estabilidad y eficiencia en el funcionamiento de la economía. En ese sentido, el dirigente liberal enfatiza la necesidad de un orden institucional y critica el caos en las calles, respaldando el protocolo antipiquetes de Bullrich como una medida audaz para restablecer el orden.
