El Gobierno nacional pospuso el tratamiento del proyecto de Ley “Bases” en la Cámara de Diputados para el próximo martes, 30 de enero. Tras conseguir el dictamen en la madrugada de este miércoles, el oficialismo tenía previsto iniciar el debate en el recinto de la Cámara baja este jueves. La postergación se dio a raíz del pedido de los legisladores dialoguistas al titular del recinto, Martín Menem. La semana pasada, el Ejecutivo prorrogó hasta el 15 de febrero las sesiones extraordinarias.
Así, las espadas del presidente Javier Milei tendrán más tiempo para discutir los ejes de su apuesta jurídica-política plasmada en el megaproyecto rotulado como Ley de “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”. La acción se conoció después de que finalizara el paro y movilización convocados por la Confederación General del Trabajo (CGT), contra esa iniciativa del Gobierno y el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/23.
La Libertad Avanza, junto a representantes del PRO, la Unión Cívica Radical (UCR) y Hacemos Coalición Federal, llegaron a un acuerdo y firmaron un dictamen de mayoría con disidencias. Tras una jornada de intensísimas negociaciones, cerca de la 1.30 de este miércoles el plenario de tres comisiones de la Cámara baja que estudió el texto logró el número para el despacho.
Finalmente, el dictamen de mayoría de la Ley “Bases” cosechó 55 firmas, 34 de las cuales marcaron sus disidencias. Además , se anotaron otros cuatro dictámenes de minoría, uno de ellos de 45 firmas correspondiente a Unión por la Patria (UxP), consignó NA. Mientras los legisladores expresaban sus rechazos y apoyos a la norma en el salón central del anexo C de Diputados, en el despacho de Menem se terminó de pulir el articulado final hasta la madrugada.
En esas negociaciones estuvieron las diputadas del PRO María Eugenia Vidal y Silvia Lospennatto, parte del bloque que junto a la UCR y Hacemos Coalición Federal acompañaron con algunas disidencias el dictamen de la mayoría. Esas firmas dejaron a la también denominada Ley “ómnibus” en condiciones de llegar al recinto el próximo jueves, paso clave para el objetivo final del Poder Ejecutivo.
Por los intercambios que se dieron a lo largo de toda la jornada, el plenario de comisiones que estaba convocado para las 18.00 debió correrse primero para las 20.30 y luego para las 21.00, ya que los diálogos frenéticos se dieron entre diputados, gobernadores y referentes del gobierno nacional no llegaban a una conclusión. Las divergencias internas más notorias se plasmaban dentro de la bancada de la UCR, que encabeza el cordobés Rodrigo De Loredo.
Apoyado en el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, De Loredo marcó el artículo que grava impositivamente a las retenciones de las economías regionales como un retroceso al kirchnerismo. Dentro del partido centenario, el legislador bonaerense Facundo Manes rechazó el proyecto en general y dijo que solo logrará “empobrecer aún más” a los argentinos.
Por Hacemos Coalición Federal, que lidera Miguel Ángel Pichetto, se daría libertad de acción a la hora de la votación y, por ejemplo, la Coalición Cívica presentará un dictamen propio por no estar de acuerdo con puntos clave de la ley. “Esperamos que las respuestas que le han dado a los gobernadores estén receptadas en el dictamen. Tenemos una visión receptiva de no poner palos en la rueda”, indicó Pichetto a la prensa antes del plenario.
Durante el debate, el jefe de bloque de UxP, Germán Martínez, ratificó que su espacio votará por el rechazo del dictamen y apuntó fuertemente contra algunas figuras del oficialismo, entre ellos, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el asesor Federico Sturzenegger. “Desde 2005 para acá no recuerdo una comisión que esté tratando un tema de esta envergadura y que se convoque para iniciar el debate política con deseo del oficialismo de dictaminar, que se junten a las 20.30 y que se arranque a las 21”, se quejó.