En el marco del debate sobre la Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, que ya está en el Congreso de la Nación, el oficialismo busca mantener un buen vínculo con sus opositores. El trato es especial para Hacemos Coalición Federal, encabezada por Miguel Ángel Pichetto, porque le daría los votos para obtener media sanción. A pesar de esto, al exfuncionario del PRO lo acusaron de mantener reuniones secretas y de hablar con Federico Sturzenegger.
Para calmar las aguas y marcar que la postura de su espacio también importa, Pichetto negó estos rumores y chicaneó al economista: «Las reuniones que mantuve en relación a la Ley Ómnibus se han realizado de manera pública, en el marco del bloque al que pertenezco y en el ámbito de la Cámara de Diputados», aseguró el dirigente.
«No tuve ni tendré ninguna reunión con el Sr. Sturzenegger porque no es funcionario de este gobierno», aclaró a modo de chicana. El tema no terminó allí, porque es un debate que viene hace varios días, y en el espacio que él mismo lidera emitieron un comunicado para aclarar ciertas cuestiones de este proyecto, conocido popularmente como Ley Ómnibus.
«Quienes formamos parte de los bloques Hacemos Coalición Federal e Innovación Federal tenemos el compromiso de otorgar gobernabilidad y darle al Gobierno las herramientas que necesita para sacar a la Argentina de esta profunda crisis. Sin embargo, no estamos dispuestos a hacerlo sin marcar diferencias y defender nuestras convicciones, ya que también nuestros votantes nos han otorgado un mandato que vamos a respetar«, señalaron.
Además, aseguraron que «El Ministro de Economía @LuisCaputoAR que no tuvo la valentía de venir al Congreso, tiene que dejar de apretar a los gobernadores y tratar de buscar acuerdos con los gobiernos provinciales en lugar de amenazarlos». Así, la tensión con la oposición dialoguista aumentó en las últimas semanas y recién la próxima semana se sabrá si la relación está rota o no.
