Sincera y con el corazón en la mano. De esta manera es como se mostró nada más y nada menos que Flor de la V en sus redes sociales. Fue en su cuenta de Instagram donde dejó un sentido posteo a diez años de la muerte de Jorge Ibañez, uno de sus mejores amigos, y con quien tenía un vínculo entrañable.
«Ya pasaron 10 años de tu partida. Para los que no te conocieron les cuento que Jorge era la vida, fue una persona en estado de primavera permanente. Jamás conocí a alguien a quien le resultara tan propia la felicidad o la tristeza ajena. Es que para él nada era ajeno…», comenzó diciendo la artista.
«Te tomaba de las manos, te decía ‘contame’ y, como sólo saben hacer los elegidos, se iba mimetizando con tus historias como si fueran propias; entonces mágicamente te hacía sentir que tu alegría se amplificaba o tu dolor se reducía. Aún en su reconocido e inigualable talento como creador se le notaba ese amor por el otro», comenzó Flor de la V.
Inmediatamente decidió ir por más. «Porque él no sentía el orgullo egocéntrico de ver reconocidos sus vestidos; él sentía la satisfacción plena de haber ayudado a que alguien se sienta más bella, más plena, en total armonía consigo. Ahora quiero hablarte a vos, Jorge. Quiero que estas palabras vuelen y surquen los cielos para llegar a esos oídos que tantas veces con tanto amor me escucharon», destacó.
«No me queda la sensación de no haberte dicho lo mucho que te amaba; todos te amábamos y te lo decíamos, Pablo, mis hijos, pero es inevitable sentir que la muerte me arrancó una parte de mí, que tu ausencia es ahora una presencia permanente, necesaria. Sé que no te gustaría verme devastada, sé que me abrazarías hasta que mis lágrimas te llenaran esos hombros de seda que tenías», aclaró.
«Jamás, ni en la peor de mis pesadillas podía imaginarme que te irías tan pronto. Fue terrible afrontar tu muerte sin vos, que eras quien siempre me auxiliaba ante el dolor. Pero quiero decirte que cuando este mar de lágrimas deje paso a los recuerdos tendré recuerdos tuyos como para llenar el resto de mi vida, como para ir teniéndote hasta que pueda, de una vez y para siempre, volver a tenerte a mi lado. Te amo, Feliche, amigo, hermano, compinche, confidente, gurú. Siempre me sentí tan bien vestida por vos…nunca me sentí tan desnuda como hoy», finalizó Flor de la V.