En un giro en su posicionamiento respecto a la guerra en Medio Oriente, Argentina reclamó un acuerdo entre Israel y Hamás junto a otros 16 países. Sorprendió la suscripción del gobierno de Javier Milei, fuertemente alineado con Tel Aviv, al reclamo respaldado por administraciones de izquierda de la región como la de Lula da Silva y Gustavo Petro, muy críticos con el accionar del primer ministro Benjamín Netanyahu.
«Como líderes de países profundamente preocupados por los rehenes retenidos por Hamás en Gaza, incluidos muchos de nuestros propios ciudadanos, apoyamos plenamente el movimiento hacia un alto el fuego y un acuerdo de liberación de rehenes que ahora está en discusión, tal como lo describió el presidente Joe Biden el 31 de mayo de 2024», expresa el comunicado de la Casa Blanca.
«No hay tiempo que perder. Instamos a Hamás a cerrar este acuerdo con el que Israel está listo para seguir adelante, y comenzar el proceso de liberación de nuestros ciudadanos», agrega el documento, que también lleva las firmas de líderes de España, Reino Unido, Francia, Alemania, Brasil y Colombia, entre otros.
El comunicado continúa: «Observamos que este acuerdo conduciría a un alto el fuego inmediato y a la rehabilitación de Gaza, junto con garantías de seguridad para los israelíes y palestinos, y oportunidades para una paz más duradera a largo plazo y una solución de dos Estados».
«En este momento decisivo, hacemos un llamado a los líderes de Israel así como a Hamás para que hagan todos los compromisos finales que sean necesarios para alcanzar este acuerdo y brindar alivio a las familias de nuestros rehenes, así como a aquellos de ambos lados de este terrible conflicto, incluyendo las poblaciones civiles. Es hora de que termine la guerra y este acuerdo es el punto de partida necesario», concluye.