El dirigente del Polo Obrero (PO) Eduardo Belliboni se sometió este martes a indagación en los tribunales federales de Comodoro Py, en la ciudad de Buenos Aires, por la causa donde se lo investiga por presunto desvío de fondos del programa Potenciar Trabajo para financiar a su fuerza política. Si bien expuso durante tres horas, Belliboni no respondió las preguntas que le hicieron.
La indagatoria frente al juez federal Sebastián Casanello -el mismo que investiga la causa alimentos del Ministerio de Capital Humano- y el fiscal Gerardo Pollicita transcurrió a lo largo de tres horas. Durante ese tiempo, el dirigente social y María Isolda Dotti, una militante del PO que se acercó a Comodoro Py con el mismo fin que Belliboni, negaron las acusaciones de extorsión y coacción, consignó NA.
Los referentes del PO describieron el funcionamiento de los comedores y dieron algunas explicaciones por los cargos que se les imputan. No obstante, ninguno se refirió a los delitos de administración fraudulenta y facturas apócrifas que forman parte de la denuncia contra ellos. En tanto, manifestaron los problemas que significa gestionar las necesidades de las personas y describieron las consecuencias de la campaña negativa que sufrieron en los medios de comunicación.
A su vez, Belliboni calificó la cobertura de los medios de comunicación en su contra como un “fusilamiento mediático”. De igual manera, apuntó contra la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, por la filtración de conversaciones telefónicas y chats privados. Además, el referente del PO manifestó que esos datos eran reportados directamente a la titular de Seguridad antes que a la Justicia.
En tanto, Dotti confirmó la existencia de sanciones a beneficiarios de parte de las organizaciones. Las mismas no se aplicaban sobre quienes no formaban parte de las movilizaciones, sino a los que incumplían con las respectivas prestaciones, argumentó. Por último, Belliboni y Dotti afirmaron que el dinero que recibían del Estado no era suficiente, lo que llevó -a su criterio- a las organizaciones a confeccionar listas de espera para recibir alimentos o planes.
Tanto a Belliboni como a Dotti los habían citado a declarar el pasado 27 de mayo tras el allanamiento de los comedores que administra el Polo Obrero. La llegada de los dirigentes sociales a Tribunales estuvo acompañada de militantes de la agrupación de izquierda con el objetivo de respaldarlos bajo el lema “Basta de persecución”.
El descargo de Belliboni en X
En su cuenta de X (antes Twitter), Belliboni ahondó: “Hoy me presenté a frente al Juez y el Fiscal, en la causa armada por Patricia Bullrich para quebrar a las organizaciones que la desafiamos con aquella movilización del 20 de diciembre”. “Explicamos que no hay ninguna coacción cuando cientos de miles de personas se movilizan contra el hambre que es responsabilidad del Estado”, puntualizó.
En esta línea, acusó que “el Polo y todo el movimiento piquetero fueron el canal de ese enorme reclamo, cuya existencia es responsabilidad de quienes nos vienen gobernando”. Tras lo cual, indicó: “Refutamos las acusaciones de extorsión por aportes, que son voluntarios y sin los cuales hubiera sido imposible poner en pie miles de comedores populares en todo el país”.
“También les marcamos que es al revés de lo que nos acusan. Para instalar un comedor popular hacen falta 5 millones de pesos. La militancia del Polo y el movimiento piquetero puso el hombro para poner en pie cientos de comedores que el Estado se desentiende de garantizar”, continuó Belliboni, al tiempo que aseveró: “Y mostramos parte de la labor que desenvolvimos con los convenios”.
Belliboni dijo que a partir de esos convenios se aportó maquinaria para capacitación, se realizaron cursos en todo el país y campañas anti dengue, entre otras tareas. “Ni sueñen con quebrarnos. A esta causa, como la detención de los presos políticos por luchar contra la Ley Bases, la vamos a derrotar esta persecución y al gobierno de (el presidente Javier) Milei movilizados en las calles junto a toda la clase obrera”, sentenció.