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“Se supone que debería estar muerto”: Donald Trump rompió el silencio tras el intento de magnicidio

El expresidente de Estados Unidos aseguró que está vivo “de milagro” tras ser rozado por una bala en Pensilvania. Llegó esta mañana a Milwaukee para asistir a la Convención del Partido Republicano que lo nominará como candidato.

Donald Trump
Foto: Evan Vucci (AP)

El expresidente Donald Trump rompió el silencio tras el impactante intento de magnicidio que sufrió en Pennsylvania, Estados Unidos, durante un acto de campaña el día sábado. “Se supone que no debería estar aquí, se supone que debería estar muerto”, afirmó. Mientras daba su discurso, Thomas Matthew Crooks, de 20 años, abrió fuego contra él y lo hirió en una oreja luego de que una bala alcanzara a rozarlo.

Trump compartió con el diario The New York Post la que calificó de “experiencia muy surrealista. El exmandatario y actual candidato presidencial consideró que está vivo “de milagro” tras escuchar al personal de salud que lo asistió después del ataque. «El médico del hospital dijo que nunca había visto algo así, lo llamó un milagro”, reveló el líder del Partido Republicano.

El expresidente afirmó que otro habría sido el desenlace si no hubiera girado ligeramente la cabeza hacia la derecha para leer un gráfico sobre inmigrantes ilegales. De no haber hecho eso, el disparo que le hirió la oreja y le salpicó sangre en la frente y la mejilla hubiera sido mortal.

Donald Trump elogió el operativo

Durante la entrevista a bordo del avión privado con destino a la Convención Nacional del Partido Republicano en Milwaukee, Donald Trump recordó que mientras los agentes del Servicio Secreto lo evacuaban del escenario, él todavía quería dirigirse a sus seguidores. Sin embargo, los guardias le dijeron que no era seguro y que tenían que llevarlo al hospital.

“Los agentes me golpearon tan fuerte que se me cayeron los zapatos, y eso que mis zapatos están ajustados”, rememoró Trump, quien por el operativo de protección sufrió un golpe en el antebrazo. Además, elogió al personal del Servicio Secreto por abatir al tirador. “Hicieron un trabajo fantástico”, añadió, “es surrealista para todos nosotros”.

No obstante, uno de los asistentes a la manifestación murió por disparos, y dos resultaron heridos. Cuando se le preguntó si había pensado en asistir al funeral de Corey Comperatore, el bombero que murió protegiendo a su familia de los disparos del asesino, Trump dijo que sí, y pidió los números de las familias afectadas para contactarse con ellas.

La foto que recorrió el mundo

El candidato republicano también se refirió a la foto de él levantando el puño y diciendo “pelea” tres veces mientras los agentes intentaban sacarlo del escenario y subirlo a una camioneta blindada, con la bandera de Estados Unidos flameando en el aire.

“Mucha gente dice que es la foto más icónica que jamás hayan visto”, dijo Trump. “Tienen razón y no morí. Normalmente hay que morir para tener una imagen icónica”. Y añadió: “Sólo quería seguir hablando, pero me acaban de disparar”.