No hay dudas de que Gran Hermano ha sido el gran protagonista este año en la televisión argentina. Aunque los humos por el reality han bajado desde su final, los participantes todavía tienen mucho que contar. Quien sorprendió con sus declaraciones fue Isabel De Negri, que estuvo como invitada en Socios del Espectáculo, el ciclo conducido por Rodrigo Lussich y Adrián Pallares para Canal Trece.
«En la calle me hablan de Gran Hermano. No baja, es lo contrario. Lo vivo de forma natural. Me encantan las cámaras, así que para mí es un placer cada vez que me invitan a un programa. Tengo muchos deseos de hacer cosas que postergué durante una vida, porque tuve una familia, hijos, nietos, soy sommelier, tengo una vinoteca hace 21 años…», contó Isabel De Negri.
«¿Qué fue lo que postergaste?», quiso saber Mariana Brey, a lo que Isabel De Negri reveló: «Cuando tenía 17 años se me abrieron unas puertas en aquel antiguo Canal Trece, Canal Nueve, Canal Once, pero me casé muy joven. A los 21 años ya tenía un hijo y a los 24 ya tenía dos. Me dediqué a la familia, porque quise. Nadie me dice lo que tengo hacer».
«Yo entro a este reality porque mi hijo miraba Gran Hermano, yo no lo miraba. Yo le dije ‘si me anoto entro’, banco los desafíos. Tengo mucha vitalidad, sabía que soy un ejemplo para la gente joven y también para la gente grande, que a esta edad se puede. Tengo 65 años. Yo quería mostrar que podía bailar y cantar los mismo temas que los chicos de veinte», señaló.
«Yo entro a la casa sin saber jugar y sin haber visto Gran Hermano. Me pegaron por el lado de mis hijos, eso me sacó. Mis hijos estaban internados, entonces estaba completamente angustiada. Firmé un contrato y tenía que cumplir. Yo sabía que ellos lo iban a entender, pero el problema era mío. Mis hijos ya son grandes, prefiero no hablar de ellos», se sinceró Isabel De Negri.
«Mi hijo está en una comunidad terapéutica, es lo mejor que le pudo pasar. Yo no tengo problema en hablar y contarle a la gente cómo hay que manejarse en esta crueldad que nos ataca, es un flagelo. Todos vivimos un drama, estamos hablando de adicciones. Cuando salí de la casa estaba muy angustiada y estaba llena de haters», siguió la ex Gran Hermano.
«Yo estaba haciendo el papel de villana y no supe explicarlo a las cámaras. Salí al mes. Yo entendí que Gran Hermano era un juego. Me sorprendí cuando volví a entrar en el repechaje y decidí ser yo. Salí sin haters, me aman. Tengo el 80% del público femenino, que va de los 15 a los 45 años aprox. Me paran por la calle todas chicas jóvenes», cerró Isabel De Negri.
