En las últimas semanas mucho se habló sobre la situación de salud de Benito Fernández. Fueron varias las versiones que circularon, pero, finalmente, el diseñador habló en una nota con el portal TeleShow y dió detalles sobre su internación en una clínica psiquiátrica. Sobre su estado actual, expresó sentirse «reseteado». «Me dejé en cero y hoy estoy súper bien, enfrentando las cosas que tengo que enfrentar, pero desde otro lugar», precisó.
Luego, Benito Fernández dió más detalles y explicó: «Yo hablaba con mi psicólogo y le decía que a mí cuando me pasó algo, por ejemplo, cuando me fundí en el 2001, cuando hice el vestido de Natalia Lobo, y que todos dijeron que era un disfraz, me deprimí muchísimo. Pero después vuelvo y estallo para arriba, me reinvento. Es increíble lo que me pasa, pero esta vez no quiero que me vengan más cosas que afecten mi salud» declaró.
Acto seguido, Benito Fernández contó que fue lo que derivó en su malestar. «La realidad es que me agarró un pico de estrés, de angustia, de depresión, tuve arritmia», explicó. Además, comentó que se aisló por recomendación de su psiquiatra y su psicóloga, por lo que decidió internarse. Imaginaba que iba a ser un lugar hostil (…) No es así. Entonces dije: ‘Sigamos adelante’, y me interné», sentenció.
El mal momento económico de Benito
En las últimas horas se viralizó un vídeo en que el hijo de Benito Fernández obliga a una empleada a retirarse de uno de los locales del diseñador y esto desató la polémica. A partir de allí, se supo que Fernández atraviesa un duro momento financiero que lo llevó a cerrar varios negocios y despedir al personal. En LAM, por América TV, hablaron al respecto y señalaron: «Hay mucho hermetismo y nadie te quiere decir nada. (Benito) no lee los mensajes directamente».
Matilda Blanco, panelista del ciclo de espectáculos de América TV remarcó sobre Benito Fernández: «Se vio desbordado por todo lo que pasó económicamente en el país y a la moda le tocó realmente de cerca, y Benito fue uno de ellos». Mientras tanto, Ángel De Brito precisó: «Me cuenta una persona que trabaja ahí que Benito está quebrado. Que no paga las indemnizaciones a los empleados de muchos años que han dejado de ser parte de la empresa».