No hay dudas de que Facundo Arana es uno de los actores más aclamados del mundo del espectáculo. No solo exhibe su talento, tanto en la actuación como en la música, sino que además es sumamente querido por la gente, especialmente por la cantidad de novelas que ha protagonizado, entre ellas Padre Coraje, Muñeca Brava y Farsantes.
Siempre cercano a la gente, Facundo Arana no tiene reparos a la hora de abrir su corazón y hablar de su intimidad. Invitado a Entre Nos, el ciclo conducido por Tomás Dente para Net TV, el actor se animó a hablar como nunca de su relación con su padre. Movilizado, reflexionó sobre el legado que dejó su papá, Jorge Arana, en su familia.
«Estoy eternamente agradecido por haberlo tenido en mi vida durante tantos años. Fue un regalo poder disfrutar de su presencia hasta una edad avanzada», dijo Facundo Arana sobre su padre, que falleció a los 81 años. Sobre el esfuerzo que hizo su papá para estar presente en la vida de sus hijos, el actor mencionó: «Fue inspirador ver cómo cambió su vida para dedicarse a la familia».
«Abandonó su carrera en la Justicia para enseñar en la universidad y estar más cerca de nosotros. No puedo más que agradecer por eso», contó Facundo Arana. Sobre su presente, el actor habló de la importancia de tener a su familia y a sus amigos cerca: «Me siento profundamente acompañado en esta etapa de mi vida. Estamos en sintonía y eso es muy valioso».
Facundo Arana habló del cáncer que atravesó a los 17 años
En conversación con María Laura Santillán para Infobae, Facundo Arana rememoró: «Yo tenía 17 años, era muy chico, pero cuando te dan un diagnóstico como ése o pasa algo muy fuerte en tu vida es como si toda tu existencia pasara por un colador. Todos somos producto de lo que fuimos viviendo a lo largo de la vida. A todos nos pasaron cosas tremendas, pero lo que viviste te puede haber servido de trampolín para que vayas hacia dónde querés ir”.
“Te da una gran enseñanza también. Haciendo ese paralelismo con la montaña, hay una cosa que se dice ‘el hombre perdona a veces, Dios siempre, la montaña no sabe perdonar’”, continuó Facundo Arana, que fue diagnosticado con cáncer de ganglios. “Siempre me llevé muy bien (con Dios) porque desde muy chico le pido con toda mi alma y le agradezco también con toda mi alma”, expresó.
“Siempre fui de pedir muy fuerte y rezar muy fuerte. Lo aprendí de chico y siempre me acompañó mucho en momentos donde lo único que podés hacer es rezar. Cuando vivís momentos en que lo único que podés hacer es rezar, sería un gran hipócrita si no creyera en aquello a lo que le recé, porque le recé a Dios con toda mi alma. Lo elijo como mi cosa más sagrada en lo que para mí es lo más lindo de mi oficio que amo tanto. Son cosas que te van construyendo en el tiempo”, contó.
