El consumo de servicios públicos como la luz, el gas y el agua experimentó una notable caída en junio, alcanzando su nivel más bajo desde abril de 2020, según informó el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). En términos interanuales, el descenso fue del 9,6%, mientras que en comparación con el mes anterior, la baja fue del 1,1%. Este retroceso se relaciona directamente con la recesión económica y el incremento de las tarifas.
El Indicador Sintético de Servicios Públicos (ISSP), que mide la evolución de la demanda de estos servicios, mostró una contracción del 2,9% en junio respecto de mayo, y del 4,2% en comparación con el mismo mes del año anterior. El aumento sostenido en las tarifas de luz, gas y agua, junto con el impacto de la crisis económica, está obligando a los usuarios a reducir el consumo en sus hogares.
En un contexto de recesión que, según el Banco Central, podría llevar a una contracción del 3,9% para este año, la utilización de servicios públicos se vio severamente afectada. La situación no solo afectó a los hogares, sino también a sectores industriales como la manufactura, que registró su segunda peor caída interanual desde la pandemia.
En agosto, la división de Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles encabezó los aumentos de precios al consumidor con un incremento del 7,0%, impulsado por las subas en los costos de alquileres y servicios básicos. Este factor se ha convertido en uno de los principales responsables del retroceso en la demanda de electricidad, gas y agua, que, junto a la recolección de residuos, fue la segunda de mayor incidencia negativa en el ISSP.
Otro sector afectado fue el transporte, con una disminución del 6,9% en la cantidad de pasajeros y un 8,6% menos en vehículos pasantes por peajes, todo en términos interanuales. Sin embargo, el transporte de carga tuvo un leve repunte del 6,3%, impulsado por la recuperación de la producción agrícola tras la sequía del año anterior.
Las regiones más afectadas por la recesión en términos de consumo de agua, luz y gas
En las zonas del noroeste y noreste del país la baja del consumo de energía fue mayor por el aumento de precios relativos en los servicios públicos, con subas del 50% y 39,3% respectivamente.
En contraste, el Gran Buenos Aires y la Patagonia registraron los aumentos más bajos, con incrementos del 26,6% y 28,3%. A pesar de la baja en el consumo general, algunos sectores como el transporte de carga y los peajes mostraron una leve recuperación en términos desestacionalizados para el mes de junio.