No hay dudas que Marcelo Tinelli es considerado uno de los mejores conductores de la televisión argentina. Con una extensa trayectoria, el empresario es considerado «el padre» de varios de los humoristas más reconocidos hoy en día, entre ellos Sebastián Almada. En una reciente entrevista este se sinceró sobre el difícil momento que atraviesa.
En conversación con Pronto Sebastián Almada contó que se encuentra sin casa: «Ando corriendo de acá para allá porque estoy haciendo de todo: de gira con Tertawa, que nos tiene felices, y a la vez me estoy mudando a una casa nueva. Vendí mi casa y todavía no encontramos adónde mudarnos así que estamos en ese proceso de búsqueda».
«Guardamos los muebles en una baulera, acomodamos todo y estamos itinerantes. Igual te aclaro que tengo mi casa en Montevideo y ahí está mi mujer con los chicos», aclaró Sebastián Almada para evitar preocupaciones. Actualmente el humorista presenta la obra Delivery de humor junto a sus colegas José María Listorti y Pachu Peña en Paseo la Plaza.
“Estoy acostumbrado porque mi laburo es un poco así, de ir y venir todo el tiempo. Mis hijos ya están grandes: Lola tiene 19 años y Joaquín, 10. Gigantes y divinos. Joaquín va a la escuela y Lola está en segundo año de Medicina, en la facultad. Cuando pienso que tengo una hija que ya va a la universidad, no lo puedo creer. Es una genia y le va muy bien. Eso me marca que el tiempo vuela», expresó.
Sebastián Almada también habló del difícil momento de salud que atravesó recientemente, el cual casi le cuesta la vida. «Fue tremendo. Ahora estoy muy bien, por suerte. Me siento perfecto. Lo del granito fue en 2018 y después ya nunca más nada grave. Esa vez, me reventé un granito y se me fue el pus para la sangre y de ahí directo a los pulmones», contó.
«La bacteria viaja y aloja. Se alojó en los pulmones, estuve un mes internado, muy grave. Me tuvieron que operar, sacar el pus de la pleura. La pasé horrible y aprendí que nunca más me tengo que apretar un grano, sobre todo en la cara. Hay que cuidarse mucho. Tuve miedo. Pero aparte la pasé mal. Sufrí mucho, tremendos dolores físicos y sin poder respirar, con oxígeno todo el tiempo», recordó.
«La experiencia me sirvió para cuidarme. Antes de eso, en 2013, tuve un preinfarto y nunca más. Ahora estoy bárbaro y me cuido mucho. Tal vez tendría que hacer más deporte pero la excusa es que estoy todo el día laburando y viajando. Me la paso yendo y viniendo. Ahora, en verano, después de que debute, lo único que tengo que hacer es ir a las funciones de noche y me quedará todo el día para caminar o salir a correr por las sierras. La idea es ponerme las pilas y hacer algo de deportes», cerró el humorista.
